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De fiscal a escudero de narco: La doble vida de ‘La Maldad’

Ex asistente fiscal, José Fernando Estigarribia, se convierte en figura clave en la red de narcotráfico de Sebastián Marset.

Imagen: Última Hora

José Fernando Estigarribia, mejor conocido como ‘La Maldad’, ha pasado de ser un asistente fiscal en la Unidad Antidrogas de Paraguay a convertirse en una figura clave en la red de narcotráfico liderada por el uruguayo Sebastián Marset.

Este exfuncionario del Ministerio Público, quien renunció en 2017, ha logrado evadir la justicia y actualmente se encuentra prófugo, con una notificación roja de Interpol.

La transformación de Estigarribia es más que sorprendente. De estar al frente de la lucha contra el narcotráfico, pasó a ser administrador, testaferro, y guardaespaldas de la esposa de Marset, Gianina García Troche. Esta transición levanta serias preguntas sobre la integridad y vulnerabilidad de los sistemas de justicia y seguridad en Paraguay.

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Los lazos de Estigarribia con Marset se profundizaron con el tiempo, aprovechando su conocimiento y experiencia previa en el Ministerio Público. Se sospecha que proporcionaba información sensible y estratégica a Marset, ayudándolo a navegar y evadir la ley.

El caso adquiere un giro aún más oscuro con la supuesta manipulación de agentes de Interpol para dar de baja la notificación roja de la esposa de Marset, maniobra en la que podría haber estado involucrado ‘La Maldad’.

La influencia de Estigarribia no se limitó a Paraguay. Durante la detención de Marset en Dubái en septiembre de 2021, ‘La Maldad’ jugó un papel crucial. Según informes policiales, recomendó a Marset no regresar a Paraguay y gestionar un pasaporte uruguayo, lo que finalmente le permitió quedar en libertad.

El alcance de las operaciones de Estigarribia quedó en evidencia con el operativo A Ultranza, iniciado el 22 de febrero de 2022. Este operativo, uno de los más grandes en el país contra el narcotráfico y lavado de dinero, reveló conexiones que iban más allá de las actividades criminales convencionales.

Estigarribia, un apasionado del deporte, utilizaba fachadas comerciales en los ámbitos de las artes marciales mixtas y la gastronomía para sus operaciones ilícitas.

Fuente: Última Hora