Cerro León. Foto: Paronamio
El profesional indicó que inició con una investigación sobre hidrogeología, en el 2012, en las zonas de los parques naturales.
Explicó que en la región, un poco más de 300 millones de años atrás, existía un mar somero. Allí habrían caído al menos dos meteoritos.
«Necesitábamos evidenciar que la roca sufrió una transformación por el impacto de meteorito. Luego de varios análisis, este año confirmamos que son diamantes, a través de métodos de ataque químico», expuso.
«El conjunto de cuatro cráteres forma una especie de palangana gigante y ocupa más del 80% del territorio del Chaco. Va un poco para Bolivia y parte de Argentina. Estos impactos de meteoritos, posiblemente son uno de los mayores de la Tierra, al menos en Sudamérica, luego de las Islas Malvinas», expresó el investigador.
Remarcó que la gigantesca mina de diamantes en el Cerro León solo debe servir para la inversión turística y la ciencia.
“Para la explotación industrial existen otros lugares más accesibles, que ameritan ser explorados”, sostuvo.
El recurso se encuentra dentro del Parque Defensores, ubicado en la Reserva de Biosfera del Chaco Paraguayo.
Actualmente existe la posibilidad de que el cerro sea declarado, por la Unesco, como patrimonio mundial de la humanidad, según informó Última Hora.
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