Si se siente decaído o sin ánimos de hacer sus tareas cotidianas, puede que sea una de las más de 300.000 personas que sufren síntomas de depresión en el país.
Las cifras sobre este mal aumentan considerablemente año tras año; en conversación con la prensa, el Dr. Carlos Enciso mencionó algunas características para detectar a tiempo la enfermedad.
A continuación, conozca más sobre la depresión en 11 importantes datos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la depresión como “un trastorno mental frecuente, que se caracteriza por la presencia de tristeza, pérdida de interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima, trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de concentración”.
Si no se detecta a tiempo, esta enfermedad puede llegar a hacerse crónica, lo que dificulta considerablemente el desempeño en el trabajo, la escuela o las relaciones personales.
En su forma más grave, la depresión puede conducir al suicidio. No obstante, es un trastorno que se puede diagnosticar de forma fiable y puede ser tratado incluso en el ámbito de la atención primaria.
“Cuando hablamos de depresión desde el punto de vista psiquiátrico, no hablamos solamente de las reacciones emocionales que pueden darse ante situaciones estresantes de la vida (…) hablamos de un ánimo deprimido y la incapacidad de sentir placer, de sentir gusto por las actividades que antes le llenaban de gozo”, detalló el Dr. Enciso a la 1080 AM.
Los síntomas de la depresión pueden variar de acuerdo a cada persona, sin embargo, existen algunas características generales que evidencian la enfermedad.
Algunos de estos síntomas son: trastorno del sueño (dormir pocas o muchas horas por día), insomnio, pérdida del apetito o comer en exceso, pérdida o aumento de peso, desgano general y falta de motivación.
Otra característica que nombró el Dr. Enciso es la lentitud: “(La persona deprimida) habla despacio, la voz es ronca, lenta, pausada, todo está desacelerado”, indicó.
De igual forma, el especialista en salud mental reconoció que los casos de estrés y depresión aumentaron considerablemente a nivel país, según lo perciben sus propios colegas.
“La gente anda muy nerviosa, se sienten abrumados por muchos problemas y eso colabora al aumento de personas depresivas”, expresó. “Tengo un colega que me dijo que alrededor del 70% de sus pacientes tienen problemas afectivos”, agregó el doctor.
La OMS informó que Paraguay es uno de los países con mayor cantidad de personas con desórdenes de ansiedad o depresión en América.
Según el informe llamado “Salud y estimación de la Depresión y otras enfermedades comunes vinculadas a los desórdenes mentales 2017”, el país ocupa el cuarto lugar en toda América con 5,2 % (un total de 332.628 personas que sufren de este trastorno).
La lista en la región la encabeza Estados Unidos con un 5,9% de su población, (estimada es unos 400 millones de personas). Le sigue Brasil, con 5.8%, Cuba, con 5,5% y en el quinto lugar -después de Paraguay- se encuentra Trinidad y Tobago, con 5,2%.
Por otro lado, el índice de enfermedades mentales derivadas del trastorno de ansiedad, es aún mayor. La lista en América la encabeza Brasil, con un 9,2%. En segundo lugar ya figura Paraguay, con 7,6% (un total de 483.755 personas afectadas por esta dolencia). En la lista siguen Chile, Uruguay y Estados Unidos, en el quinto puesto.
A nivel mundial se estima que un 4,4% de la población sufre trastornos de este tipo, lo que hace un total de 322 millones de personas en todo el planeta. Otro detalle no menos importante, es que la depresión es más común entre mujeres (5,1%) que en hombres (3.6%), según informó la OMS.
Las edades de prevalencia varían, aunque la mayoría de los casos se da en personas de entre 55 a 74 años. Existen casos de depresión en niños y adolescentes por debajo de los 15 años, aunque en un nivel menor.
“Hoy se dice que el riesgo durante la vida de una persona a desarrollar depresión llega casi al 20 %. Vale decir que una de cada cinco personas va a tener un episodio de depresión en algún momento de su vida”, expresó el Dr. Carlos Enciso.
El especialista sostuvo que el uso de internet y las redes sociales obliga a estar activo por más tiempo, lo que afecta al sueño y puede aumentar la presión y el estrés en las personas.
“(Internet) juega un papel preponderante en muchos factores. Primero en el desarrollo de estrés, porque uno está conectado, entonces no hay tiempo para el ocio ni para el descanso”, comentó Enciso.
“Si uno está 24 horas pendiente del teléfono, el estrés no para en ningún momento y también afecta el sueño”, recalcó.
El profesional explicó que aquellas personas que empiezan temprano y terminan muy tarde sus actividades diarias, no descansan lo suficiente y eso aumenta considerablemente los niveles de estrés.
“El sueño es elemento reparador que tenemos durante el día”, dijo el Dr. Carlos Enciso. “La gente está durmiendo entre 5 o 6 horas al día que es muy poco. Eso genera estrés crónico y puede ser contribuyente a la aparición de trastornos afectivos”, mencionó.
Otro factor que influye en la aparición de trastornos afectivos es la “percepción negativa” sobre la realidad, dijo el galeno.
Las malas noticias de la prensa y la información sensacionalista, además de muchos problemas sociales que tiene el país, contribuyen a crear una mirada pesimista sobre la realidad que también afecta a la salud mental.
“El peor escenario de la depresión es el suicidio. El 50% de las personas que intenta suicidarse tiene depresión y el 15% de los pacientes que tienen depresión pueden llegar a morir por suicidio. Las cifras son altas”, manifestó preocupado el profesional.
Desafortunadamente, el número de personas que se quitó la vida ha ido en aumento, tanto en Paraguay como en el mundo. Los casos se dan sobre todo en jóvenes y adolescentes, detalló.
Carlos Enciso mencionó que muchas personas se automedican con ansiolíticos u otras sustancias sin prescripción médica, lo cual trae muchos riesgos para la salud.
De igual forma, el consumo diario de sustancias como el alcohol u otras drogas, pueden derivar en adicciones. Por esta razón, se recomienda evitar la autoeducación y acudir a un especialista para recibir el tratamiento adecuado.
La OMS señala que si un trastorno depresivo es leve, se puede tratar sin necesidad de medicamentos. No obstante, cuando tiene carácter moderado o grave, se pueden necesitar medicamentos y psicoterapia profesional para tratar la enfermedad.
Enciso manifestó que los factores de protección para una persona depresiva son generalmente son los afectos (amigos, familia, pareja, etc.). También remarcó que es importante “tener alguien con quien hablar”, y acudir a tiempo a la consulta con el medico para evitar males mayores.
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