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A medida que el servicio de Uber y MUV crece a nivel país, el gremio de los taxistas insiste con que estas aplicaciones compiten de manera “desleal” en el rubro de transporte de pasajeros.
Por su parte, los representantes de estos nuevos servicios se defienden y aseguran que ellos sí cumplen con todos los requisitos para operar en las calles.
Uno de los mayores problemas que presentan estos tres servicios de transporte es el de la tributación, ya que existen varias irregularidades respecto a los aportes que cada empresa realiza a la SET.
Danilo Pereira, asesor y vocero del Comité de Crisis de la Asociación de Profesionales Taxistas de Asunción (APTA), aseguró que la inscripción al sistema tributario es una decisión individual de cada chofer, por lo que no puede precisar cuánto pagó su asociación en concepto tributario durante los últimos meses. “Yo no puedo saber cuánto se pagó a nivel taxistas, ya que hablamos de Asunción, Lambaré, Capiatá, hablamos a nivel nacional”, se excusó Pereira.
Por su parte, Sergio Mura, fundador de MUV, expresó que en su empresa es un requisito fundamental que cada conductor tenga un número de RUC. “A vos como pasajero te llegaría la factura legal a tu correo electrónico”, manifestó.
Raúl Garay, representante de conductores de Uber, dijo por su parte que dicha plataforma exige a los trabajadores que estén inscriptos dentro de un rubro específico de la SET. “Tenemos que expedir facturas a todos los pasajeros, porque en la tarifa que paga un usuario del servicio de Uber está establecida ya el 10% del IVA”, explicó.
Danilo Pereira, representante de APTA, aseguró en dicha asociación “es libre tanto el ingreso como la salida”, y actualmente cuenta con unos 6.000 asociados que comprenden tanto propietarios como conductores.
Es por eso que APTA no tiene un control estricto sobre quiénes integran su asociación ni cuántas de estas personas cuentan con factura legal. “A nivel taxis de Asunción, creemos que entre un 60 y 70 % tiene factura, pero no es tampoco nuestra función (controlar), para eso está Tributación”, dijo el taxista.
Tanto taxistas como representantes de Uber y MUV, aseguran que quieren cumplir con todos los requisitos municipales y de tributación para trabajar con transparencia.
“A pedido de la asociación de taxis, vehículos del SET estuvieron dando charlas donde se le instruye a los compañeros en cuanto a la importancia de contar con la factura legal”, dijo Danilo Pereira.
Sergio Mura, por su parte, comentó que MUV ofrece “un periodo de gracia” de un mes para que sus conductores trabajen con la factura de un tercero mientras se inscriben como contribuyentes, lo cual es avalado por la SET.
“Estamos aliados con una empresa tributaria que le ayuda a gestionar eso a cada conductor. Ellos verifican que todos tengan la factura en los tiempos correctos”, aseguró Mura.
El representante de APTA acusó a la plataforma MUV de emitir facturas “por intermedio de la plataforma electrónica” y no por servicio de viaje.
“Muchos contadores están rechazando (las facturas) porque no pueden descontar, y están volviendo la gente al taxi por ese motivo. Hay diferentes regímenes tributarios, en algunos te va a servir en otros no te va a servir”, aseguró Pereira.
La supuesta “saturación del mercado” es otro de los puntos que el gremio de taxista pone en discusión. “La ordenanza municipal 26/92, que es la que rige para vehículos de transporte de pasajeros, habla que por cada 400 habitantes (tiene que haber) un vehículo. Entonces en el sistema de taxis estamos sobrepasados por 80 vehículos aproximadamente”, calculó el taxista.
Sin embargo, Raúl Garay asegura que lo de la saturación del mercado “es un cuento” y que las nuevas aplicaciones de transporte tienen una gran demanda en Asunción y Gran Asunción, además de otras importantes ciudades del país como Ciudad del Este y Encarnación.
Garay aseguró que “no se entiende cómo funciona la aplicación”, ya que este nuevo sistema de transporte es totalmente diferente al servicio de taxi.
“Cuando ellos (los taxistas) hablan de saturación, se remiten a la base de cantidad de conductores que hoy Uber tiene en su lista de datos. Yo creo que estamos por los 1.800 conductores; pero el 50% maneja solo los fines de semana; el otro 20% maneja esporádicamente entre semana, y hay un 20% que se dedica exclusivamente”, explicó.
“No es que los 1.800 están en la calle trabajando como ellos. Muchos tienen la actividad de transporte como un ingreso extra”, agregó.
Pese a la popularidad de estas aplicaciones, el servicio de Uber y MUV sigue ausente en varias zonas como Capiatá o Itaguá; es por eso que sus representantes desean que el servicio “vaya creciendo” . “Faltan al menos 10.000 conductores para cubrir el radio de central, sin contar con los otros servicios de Uber”, aseguró Garay.
Mura, por su parte, expresó que averiguarán cuáles son los radios con más pedidos y conductores concentrados, para ir expandiendo el servicio a otras zonas. “Vamos a esparcirnos por Gran Asunción y de a poco salir de ese radio”, manifestó.
Danilo Pereira manifestó que, según circula en las redes sociales, hay testimonios de personas que abandonaron dichas plataformas porque “no les rinde” y obtienen pocas ganancias.
“Eso depende del vehículo-se defendió Raúl Garay- hay gente que se maneja en camionetas nafteras y de repente no les es rentable; otros se compran un vehículo exclusivamente para trabajar de eso”, sostuvo.
Danilo Pereira admitió que los miembros de la APTA están obligados a cargar 80 litros mensuales de combustible en la estación de servicio perteneciente a la asociación, supuestamente para colaborar con los gastos administrativos y el pago de salario de los operadores del radio-taxi.
“80 litros mensuales no es nada para un taxi, que carga 15 a 20 litros diarios de combustible. Es una resolución de asamblea; ese combustible que cargan los compañeros hace que la asociación pueda subsidiar un montón de cosas”, argumentó Pereira.
Ante el cuestionamiento por el millonario precio que algunos taxistas piden por las “paradas”, Danilo Pereira aseguró que no se puede vender el espacio público, sino la cartea de clientes con la que cuenta el chofer.
“Lo que se vende no es la parada (…) yo lo que te vendo es mi clientela, no el espacio público. Yo te vendo la llave, tengo que salir de ahí para que vos entres”, explicó. En cuanto al uso de las veredas como paradas de taxi, el representante dijo que “(la vereda) es un espacio que la municipalidad cede en favor del ciudadano”.
“No todos tienen auto, la gente se va caminando hasta la parada de taxi, tiene que saber dónde está. Es un servicio municipal”, aseguró.
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