Foto: Jonathan Fabbro.
Desde el año 2017, el exjugador Jonathan Fabbro venía enfrentando un proceso judicial por abusar sexualmente de su ahijada, desde que la niña tenía cinco hasta los once años de edad.
El juicio en contra el futbolista terminó el pasado jueves, cuando la justicia argentina lo declaró culpable de todos los cargos y lo sentenció a 14 años de prisión. Mientras tanto, hay otra pequeña presuntamente abusada por el futbolista que también espera justicia en Paraguay (detalles en el punto 10).
En mayo del 2017, comenzó a circular en medios argentinos un expediente en contra del futbolista argentino nacionalizado paraguayo, Jonathan Fabbro. Según dicho documento, el deportista estaba siendo investigado por un caso violación a una menor de su entorno familiar, quien en ese entonces tenía 11 años.
Fabbro fue sindicado bajo la figura penal de “abuso sexual con acceso carnal agravado”, hechos que habrían ocurrido entre los años 2014 y 2015. La madre de la víctima presentó evidencias muy comprometedoras para el exjugador de la Selección Paraguaya, y la causa quedó a cargo del Juzgado de la Ciudad de Buenos Aires.
En diciembre del 2017, Fabbro fue detenido por las autoridades mexicanas en el estado de Puebla, México. Hasta ese entonces el deportista jugaba para las filas del club Lobos BUAP, el cual finalmente le rescindió el contrato.
Aunque la defensa del jugador aseguraba que se entregó voluntariamente, Interpol confirmó que tenía dos circulares rojas en su contra desde hacía tres semanas, y luego de un trabajo investigativo fue arrestado en un hotel por personal de la Agencia de Investigación Criminal.
En abril 2019, Jonathan Fabbro finalmente fue extraditado a Argentina. El jugador, de 37 años, fue entregado en custodia por personal de Interpol México a sus pares del vecino país, quienes lo trasladaron hasta una cárcel de Marcos Paz, provincia de Buenos Aires; allí permaneció con prisión preventiva a la espera de un juicio.
La madre de la menor abusada presentó ante la justicia argentina una serie de mensajes que Jonathan Fabbro le envió a su hija vía WhatsApp, en donde le hacía fuertes insinuaciones sexuales y le pedía fotos de contenido erótico.
En las capturas de los diálogos que fueron revelados por Infobae, se pueden observar algunos mensajes en donde el futbolista le pide a la niña que le envíe fotos: “¿Tenés jeans? A verlooo…”, le expresó el jugador.
“No, ja ja. Estoy en pollera”, respondió la menor, quien le envió a su familiar dos fotografías sin ninguna connotación sexual. Fabbro le pidió más fotos, pero la pequeña se negó. “Sos mi tío, no mi novio (…) Igual no haría eso. O sea, a mi novio tampoco le mando fotos”, manifestó.
Ante la insistencia de Fabbro, quien le enviaba emoticones de “llanto”, la víctima respondió: “Perdón, pero me parece que no da (…) pedile esas cosas a tu novia”, en referencia a la modelo Larissa Riquelme.
Durante una discusión familiar, la víctima le mostró los mensajes a su hermano mayor y le confesó que Jonathan Fabbro abusaba de ella desde hacía varios años. El muchacho puso en alerta a su madre sobre la situación y finalmente radicaron la denuncia. En Cámara Gesell, se ratificó un largo historial de abusos sexuales que la menor sufrió a manos del exjugador de la Selección desde los cinco hasta los once años de edad.
En agosto del 2019, Anabel Fabbro, la hermana del acusado, lo defendió ante los medios de prensa argentinos y argumentó que no había pruebas suficientes para acusar al futbolista de violación.
“Hay una escucha de la policía en la que ella (la víctima) habla con una amiga. Le dice: la pericia dio negativo (…) acá se hizo una denuncia por violación y la nena no está violada”, señaló.
La hermana de Jonathan Fabbro aseguró que la intención de la denunciante era extorsionar a su familia para conseguir dinero, además de que los mensajes agregados por la querella eran falsos y por eso la pericia de la policía no los halló. “Fueron montados, son truchos, nunca existieron”, expresó Anabel.
Durante todo el proceso judicial, Jonathan Fabbro recibió el apoyo incondicional de sus familiares más cercanos y también de la modelo Larissa Riquelme, con quien se encuentra en pareja desde hace ocho años.
Según informó el medio argentino TN, Jonathan Fabbro, acusado de violar repetidamente a su víctima desde que tenía cinco años de edad, negó todas las acusaciones en su contra. El mismo había declarado ante la fiscalía durante una hora y media, a puertas cerradas.
El pasado 29 de agosto, Jonathan Fabbro fue sentenciado a 14 años de cárcel, tras haber sido hallado culpable de abusar sexualmente de su ahijada. El mismo permanecerá en prisión por “abuso sexual gravemente ultrajante al menos en cinco oportunidades, agravado por estar a cargo de la guarda de la damnificada”, según el fallo del tribunal oral Criminal N° 12 de Buenos Aires.
Fabbro estará privado de su libertad hasta el 19 de diciembre del 2031, según el dictamen, pero su defensa adelantó a los medios que apelarán la decisión de la Justicia.
Según reportó APF, tras escuchar la condena, la madre de la menor declaró entre llantos: “No hay alegría, solo tranquilidad. Mi hija es una valiente porque habló. Solo quiero ir a casa a abrazarla. Todo es muy doloroso”.
Por su parte, la agencia EFE informó que Gastón Marano, abogado de la familia de la víctima, manifestó: “Es una jornada de cierto regocijo, pero no hay nada que celebrar. Solo que se hizo justicia (…) Tengo que leer los fundamentos de los jueces y ver por qué eligieron ese monto de la pena, y veremos si considero que es suficiente ”, señaló el letrado.
Durante los últimos días del juicio, Fabbro hizo uso de la palabra y una vez más se declaró inocente ante los jueces Luis Óscar Márquez, Darío Martín Medina y Claudia Beatriz Moscat.
Los medios argentinos también reportaron que la modelo Larissa Riquelme, quien estaba presente durante la lectura de la sentencia, se descompensó y tuvo que ser retirada del lugar en una ambulancia.
Si bien Fabbro ya cumple una condena en Argentina, tiene abierto un caso judicial en Paraguay por el mismo hecho desde noviembre del 2017.
La víctima, quien también sería de su entorno familiar, es una niña paraguaya de 5 años de edad. Según denunció la madre de la menor, Fabbro indujo a la pequeña a que le practicara sexo oral, pero la misma se negó y dio aviso a su mamá de lo que estaba pasando.
«Fue la niña quien le contó a la madre sobre el hecho, según lo testificado por la denunciante. Vamos a realizar la diligencia correspondiente. La causa se abrió y ahora debemos citar a la menor para que testifique en cámara Gesell», contó en aquella ocasión a la prensa la fiscal Carla Rojas.
En julio del año pasado, el juez Paulino Escobar pidió la extradición del futbolista Jonathan Fabbro a Paraguay, por una causa que guarda relación con un supuesto caso de abuso a una niña de 5 años.
El magistrado expresó a Última Hora en ese momento que en caso de que el futbolista sea condenado en el vecino país, deberá cumplir primero dicha pena y posteriormente presentarse en Paraguay.
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