En total estado etílico un hombre fue hasta la casa de su expareja, a quien golpeó y posteriormente abusó sexualmente. La mujer logró pedir ayuda y una patrulla policial fue a intervenir en el hecho.
Los intervinientes procedieron a su detención, sin embargo el supuesto agresor se resistió e incluso golpeó a uno de los agentes. Finalmente, lograron detenerlo y llevarlo a la comisaría de la zona.
Los golpes y la agresión sexual fueron comprobados por los médicos que atendieron a la mujer.
La Fiscalía ordenó la rápida detención del hombre, quien posee antecedentes penales por violencia. Este ya fue remitido a la cárcel por el Ministerio Público y solo aguarda su condena.