Administrador de la playa. Foto: Captura.
El encargado de la Playa Pirayú, Xavier Baster, explicó que el sitio tiene 400 metros de largo y del cual un sector, por petición de turistas, fue sectorizado.
“Los turistas que vienen sobre todo de Asunción, Ciudad del Este y el extranjero pidieron un sector de la playa más privado, más tranquilo, con menos gente, sin música, un lugar organizado donde la gente pueda disfrutar de lo que es la playa”, comentó Baster.
Agregó que se tiene un concepto equivocado con respecto a que la gente viene a hacer “la farra” en la playa. “La playa no es para hacer la farra, la playa es para desestresarse, para disfrutar del entorno tan maravilloso, el ruido del agua y los pájaros”, indicó.
Baster señaló que se trata de una zona diferenciada, pero que no es privada, según dijo a través de un contacto con ABC TV.
Asimismo, alegó que hay otros 300 metros de playa donde la gente puede ingresar de manera libre. “Al día de hoy no se le ha cobrado por el ingreso de ninguna silla, sombrilla o latita de cerveza, ni gaseosa, ni de agua, ni de comida. Ni el uso del baño se cobra en esta playa”, sostuvo.
Sin embargo, luego señaló que puso el cartel para crear conciencia en las personas que van al sitio sobre que también se debe consumir lo que se ofrece en la playa, ya que tiene 15 funcionarios trabajando a quienes debe de pagar salarios de la recaudación.
“No se cobra la entrada, lo único que se ofrecen son los servicios como en todas las playas en Paraguay, sillas, toldos, sombrillas reposeras”, insistió.
Finalmente, Xavi Bastos, no quiso responder sobre el monto que paga como canon por usufructuar las playas de Carmen del Paraná. “La verdad que hay preguntas que no se tienen por qué responder”, dijo, de manera tajante, sin embargo se debe considerar que si hay un desembolso al erario público, la cuestión debe ser trasparente.
El cartel en cuestión fue viralizado días atrás, generando una oleada de comentarios sobre el turismo interno y sus costos.
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