Este viernes, durante una tarde que prometía ser tranquila, las instalaciones del Congreso Nacional se vieron envueltas en una nube de fumigante.
La situación sorprendió a varios funcionarios que aún se encontraban trabajando en el interior del recinto.
Un incidente por falta de coordinación
Varios de los presentes tuvieron que salir con síntomas evidentes de molestia, como ojos llorosos y tos.
La causa del incidente, como señaló Analia Brítez, directora general administrativa del Senado, fue una falta de comunicación.
El Servicio Nacional de Erradicación del Paludismo (Senepa) lleva a cabo un programa de fumigación en diversas instituciones públicas, debido a la preocupante cantidad de mosquitos.
Sin embargo, la falta de coordinación con las áreas pertinentes del Congreso desencadenó el incidente.
Reacciones inmediatas
Brítez aclaró que tan pronto como se tuvo conocimiento de la presencia de personas afectadas, la fumigación fue suspendida.
“Aunque la fumigación se realizó fuera del horario laboral, nunca imaginaron que aún habría empleados en el edificio”, comentó. A pesar de la rápida interrupción, el veneno esparcido ya había afectado a algunos funcionarios.
Por fortuna, no se reportaron casos graves de intoxicación ni necesidades de internación. No obstante, se tuvo que evacuar el lugar debido a la potencia del veneno utilizado.
Buscando responsabilidades
Las autoridades del Congreso ya están en proceso de recopilar datos y detalles de lo sucedido para esclarecer responsabilidades.
Fuente: Última Hora.
