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Epifeministas: La primera Asociación de Investigadoras Feministas en Paraguay

Un grupo de mujeres investigadoras se reunieron en 2021 para crear la primera Asociación Paraguaya de Investigadoras Feministas (Epifeministas). El sueño se hizo realidad el 4 de diciembre con un conversatorio con la Dra. Diana Maffía, reconocida investigadora feminista argentina.

Foto: Revista Emancipa

En un evento histórico para el feminismo y para las ciencias en Paraguay, se lanzó oficialmente la Asociación Paraguaya de Investigadoras Feministas (Epifeministas). El conversatorio “Ciencias y Género(s). Epistemología Feminista para Transformar el Presente”, contó con la participación especial de la Dra. Diana Maffía, reconocida investigadora feminista argentina.

La asociación fue fundada por un grupo de mujeres investigadoras que se reunieron en 2021 para construir colectivamente un espacio para la visibilización del sesgo de género en la ciencia y la promoción de la igualdad de género en la academia.

En su discurso inaugural, la presidenta de la asociación, Montserrat Fois, señaló que su motivación para crear Epifeministas fue la preocupación por el ocultamiento y la tergiversación de la evidencia científica sobre las teorías de género, la desigualdad de género, la violencia, la educación sexual integral, etc., por parte de grupos fundamentalistas religiosos.

“Nosotras estamos convencidas de que en un país con una desigualdad obscena es elemental la acción, el debate informado y respaldado por la evidencia para construir un país con mayor justicia social e igualdad”, expresó Fois.

En el conversatorio, la Dra. Maffía reflexionó sobre la historia de las mujeres en la ciencia y el sesgo de género que aún persiste en esta área.

“El contrato social del estado moderno relegó a las mujeres al ámbito privado. La ciencia, la política y los derechos fueron durante años espacios exclusivos para los hombres, quienes supuestamente eran los únicos dotados de cualidades como racionalidad, abstracción, universalidad y objetividad”, señaló Maffía.

“Tenemos que pensar que esa ciudadanía se manifiesta como universal y el conocimiento científico como universal en una comunidad epistémica muy idéntica en privilegios: todos eran varones blancos, ricos y adultos. Esa identidad no la ponen en cuestión y van a considerar que lo que ellos producen es universal”, agregó.

Maffía concluyó su ponencia enfatizando el valor de la perspectiva de género en la ciencia.

“Es poner en evidencia el sesgo de género que ya habita la ciencia”, manifestó.

El conversatorio culminó con un panel de discusión sobre los desafíos y oportunidades de la investigación feminista en Paraguay.

Las participantes del panel coincidieron en que la creación de Epifeministas es un paso importante para el avance del feminismo y de las ciencias en el país.

Durante el evento, la Dra. Diana Maffía proporcionó una mirada crítica sobre el contrato social del estado moderno, señalando que este ha sido históricamente excluyente hacia las mujeres, los indígenas, los afrodescendientes y aquellos sin propiedad privada. Según Maffía, este contrato social es inherentemente racista, sexista, adultocéntrico y clasista. En su discurso, ella cuestionó la universalidad del conocimiento científico, que tradicionalmente ha sido producido y promovido por hombres blancos, ricos y adultos. La perspectiva de género, según Maffía, desafía este sesgo y revela la diversidad de voces y experiencias que deben ser consideradas en la producción de conocimiento científico.

El evento concluyó con un llamado a la acción y un compromiso para continuar proporcionando insumos académicos basados en evidencia para transformar el presente. Montserrat Fois, presidenta de Epifeministas, afirmó que la asociación ha llegado para quedarse y desafiar discursos pseudocientíficos promovidos por grupos fundamentalistas religiosos que perpetúan la discriminación, la exclusión y la violencia. Para Fois, la lucha por la justicia social e igualdad en un país marcado por una “desigualdad obscena” es fundamental, y debe estar respaldada por un debate informado y evidencia sólida.

Fuente: Revista Emancipa.