Una multitud de activistas despliega una enorme bandera arcoíris frente al Parlamento griego, el 9 de junio de 2018. Foto: RR.SS
En una votación parlamentaria histórica, el jueves pasado, el Parlamento griego aprobó la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo. Con 176 votos a favor de un total de 300, Grecia se convierte en el primer país cristiano ortodoxo en dar este paso, a pesar de la fuerte oposición de la Iglesia y de sectores conservadores.
El primer ministro Kyriakos Mitsotakis celebró esta medida como un avance en los derechos humanos y la igualdad matrimonial, destacando el orgullo de Grecia al ser el décimo sexto país de la Unión Europea en aprobar legislación sobre este tema.
Durante el debate parlamentario, el actor Spyros Bibilas conmovió con su relato personal, evidenciando la importancia emocional de esta decisión para muchos ciudadanos griegos.
La nueva ley no solo legaliza el matrimonio homosexual, sino que también otorga derechos de adopción a las parejas del mismo sexo, aunque persisten limitaciones en áreas como la inseminación artificial y la gestación subrogada.
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La Iglesia ortodoxa griega y sectores conservadores expresaron su oposición a la medida, reflejando la división en la sociedad griega sobre este tema.
El primer ministro Mitsotakis, enfrentando desafíos políticos internos y externos, busca proyectar una imagen progresista y comprometida con los derechos civiles mediante esta legislación. Esta decisión marca un hito en la historia moderna de Grecia y refleja su evolución hacia la igualdad y la inclusión.
Fuene: DW
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