Un grupo de exfuncionarios de la sección de Tasaciones y Documentaciones Inmobiliarias del Instituto de Previsión Social (IPS) denunció un llamativo aumento en las remuneraciones de varias funcionarias administrativas del ente. Según los documentos presentados, estas empleadas, presuntamente amigas entre sí, pasaron a ganar el doble desde enero de 2024.
De acuerdo con los registros del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Brunilda Aurelia Martínez Rodríguez, quien se desempeña como analista de calidad en el IPS, vio su remuneración total ascender de G. 7.937.525 en el año anterior a G. 12.462.000 en enero de 2024. Asimismo, Liza Maribel Jara de Antúnez, otra funcionaria administrativa, experimentó un aumento de G. 5.731.000 a G. 9.954.000.
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El caso de Margrit Robalo de Aveiro, asistente administrativa, también llama la atención. Su salario pasó de G. 8.694.115 en diciembre de 2023 a G. 15.187.000 en enero. Por su parte, Natalia Lorena Fernández, otra asistente administrativa, cobró G. 17.980.215 en enero, un significativo incremento en comparación con su salario anterior de G. 10.690.000.
Olga Marialis Schreiber Vaccaro, auxiliar administrativa, también se benefició de un aumento, pasando de G. 4.395.000 a G. 6.920.000. Susana Beatriz Guggiari de Pereira, quien hasta el año pasado percibía una remuneración mensual de G. 6.767.689, ahora cobra G. 12.057.190. Mirta Carolina Jara Alemán, por su parte, vio su salario incrementarse de G. 3.095.447 a G. 6.190.894.
Según los documentos oficiales, estos aumentos se deben a una “asignación complementaria”, aunque no se especifica la razón detrás de dicha asignación.
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Los denunciantes, quienes prefirieron mantener su anonimato, aseguraron que fueron excluidos de la entidad previsional por no formar parte del supuesto grupo de amigas. Además, afirmaron que en la sección ubicada en Palma casi Colón de Asunción, donde trabajanentre 280 y 300 funcionarios, muchos no cumplen horarios ni tienen funciones definidas.
Esta sección del IPS se encarga de manejar las documentaciones y la parte administrativa de los inmuebles o propiedades pertenecientes al ente. También alberga la Caja de préstamos a Jubilados. Hasta el momento, no se obtuvo una respuesta oficial por parte del IPS respecto a las denuncias presentadas.
Paralelamente, aportantes del IPS continúan denunciando la falta de insumos y los elevados gastos que deben afrontar para recibir asistencia médica. En casos de cirugías e internaciones, los asegurados reportan desembolsos de hasta G. 40 millones.
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Julio Pereira, un asegurado del ente, relató el caso de su madre, Lidia Inés Ruiz de Pereira, quien falleció por una presunta infección hospitalaria en el Hospital Ingavi tras 70 días de internación. La familia tuvo que realizar un gasto que supera los G. 40 millones durante ese periodo, además de denunciar una supuesta negligencia médica.
Los pacientes crónicos, que requieren medicación diaria, también se ven afectados por las carencias del sistema. Según quejas recibidas, estos asegurados realizan un gasto mensual de al menos G. 400.000 para cubrir las falencias en la provisión de medicamentos por parte del IPS.
Fuente: ABC.
