Israel admite ataque “involuntario” que mató a 7 voluntarios en Gaza

En un trágico incidente, siete trabajadores humanitarios de la organización no gubernamental World Central Kitchen (WCK) perdieron la vida en un ataque aéreo israelí en la Franja de Gaza. Entre las víctimas se encuentran tres británicos, un australiano, un polaco, un palestino y un ciudadano de doble nacionalidad estadounidense/canadiense.

ONG suspende operaciones en Gaza

Como consecuencia del ataque, WCK anunció la suspensión de sus operaciones en Gaza. “Este no es sólo un ataque contra WCK, es un ataque contra organizaciones humanitarias que se presentan en las situaciones más espantosas donde los alimentos se utilizan como arma de guerra. Esto es imperdonable”, señaló Erin Gore, director ejecutivo de la organización.

Israel investiga el incidente

El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), contraalmirante Daniel Hagari, expresó sus condolencias por lo ocurrido y afirmó que el ejército está investigando la “trágica muerte” de los voluntarios. Asimismo, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, admitió que un ataque israelí “involuntario” mató a “personas inocentes” en Gaza.

Críticas a la falta de mecanismos de ley y orden

Jeremy Bowen, corresponsal de la BBC en Medio Oriente, opina que este incidente se debe a la renuencia de Israel, como potencia ocupante, a instituir mecanismos de ley y orden. A pesar de que las organizaciones humanitarias coordinan sus movimientos con las autoridades israelíes, siguen siendo blanco de ataques.

Otra ONG suspende actividades

ANERA, otra organización estadounidense que brinda alimentos a los palestinos, también anunció la suspensión de sus operativos en Gaza tras el incidente. La ONG estaba trabajando junto a WCK para proporcionar cerca de 2 millones de comidas semanales en la Franja, donde la población enfrenta una hambruna provocada por el hombre, según la ONU.

Trabajadores humanitarios en riesgo

Los siete voluntarios de WCK no son los primeros trabajadores humanitarios que mueren durante la guerra entre Israel y Hamás, que comenzó hace aproximadamente seis meses. Según la base de datos Aid Worker Security Database, al menos 196 trabajadores humanitarios han sido asesinados en los territorios palestinos desde el inicio del conflicto, siendo el año pasado el más mortífero jamás registrado con 161 fallecidos.

Llamado a un alto el fuego inmediato

Jan Egeland, jefe del Consejo Noruego para los Refugiados y exjefe humanitario de la ONU, hizo un llamado a un alto el fuego inmediato tras el mortal ataque aéreo. “En ningún otro lugar mueren tantos trabajadores humanitarios. Debe haber un alto el fuego inmediato. Ya basta”, expresó Egeland.

La tragedia de los voluntarios de WCK evidencia la urgente necesidad de poner fin a la violencia y garantizar la seguridad de quienes brindan ayuda humanitaria en medio del conflicto. La comunidad internacional debe redoblar sus esfuerzos para lograr una solución pacífica y duradera que permita a los trabajadores humanitarios cumplir su misión sin poner en riesgo sus vidas.

Fuente: BBC

Esta web usa cookies.