Los documentos del suboficial Carlos Miguel González Aguilar, quien fue asesinado tras trabajar como conductor de la plataforma Bolt, fueron hallados a orillas del río Paraná, en el barrio Tres Fronteras, Presidente Franco. Los restos del uniformado, de 29 años, habían sido encontrados en la colonia Península, donde fue ejecutado con un disparo en la cabeza.
El hallazgo se produjo alrededor de las 18:00 horas del jueves, cuando dos pescadores, Fabián Villasboa y Luis Miguel Duarte, encontraron los documentos en la orilla del Paraná. Entre los objetos recuperados figuran chapas de un vehículo Hyundai HB20, cédulas de identidad, licencias de conducir, credenciales policiales y un chip de celular, todos a nombre de Carlos Miguel González Aguilar.
También se hallaron una credencial de aspirante a policía a nombre de Osmar Escobar Garcete, una tarjeta del Plan Solar a nombre de Carlos y Bárbara González, y una licencia de conducir vencida a nombre de Marian González.
Tras el hallazgo, los pescadores informaron al teniente de navío Fredy Rojas, quien reportó el caso a la Subcomisaría 10ª de Presidente Franco. Las evidencias fueron entregadas a la asistente fiscal Aida Sánchez, quien dispuso que fueran remitidas al agente fiscal Edgar Benítez, encargado de la investigación del crimen.
La Policía Nacional continúa investigando el caso para identificar a los responsables del asesinato del suboficial.
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Según el informe policial, el día de su desaparición, González Aguilar había salido para recoger a un pasajero en la zona de Tres Fronteras. Fue llevado hasta el Puerto Península, donde sus captores lo bajaron del vehículo y lo ejecutaron con un disparo en la parte posterior de la cabeza.
Posteriormente, los delincuentes abandonaron el vehículo cerca de una escuela, sin las chapas, en el barrio Tres Fronteras. Las imágenes de un circuito cerrado muestran a dos hombres que habrían dejado el automóvil en el lugar.
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La Policía obtuvo huellas dactilares del automóvil abandonado, las cuales serán sometidas a pericia para identificar a los sospechosos. Las autoridades esperan que esta evidencia ayude a esclarecer el caso y a individualizar a los autores del crimen.
Carlos Miguel González Aguilar seguía perteneciendo a la Policía Nacional, aunque estaba en proceso de baja por abandono de cargo. Había decidido dedicarse al trabajo como conductor de Bolt para solventar sus gastos personales mientras aguardaba la resolución del sumario en su contra.
Fuente: Última Hora
