Foto: @Encuestando
El expresidente estadounidense Donald Trump intensificó su ofensiva contra el mandatario ucraniano Volodimir Zelenski, calificándolo de “dictador sin elecciones” y advirtiendo sobre la posible desaparición de Ucrania si no actúa rápidamente para resolver el conflicto con Rusia.
A través de su plataforma Truth Social, Trump criticó duramente la gestión de los USD 350 mil millones de dólares proporcionados por Estados Unidos a Ucrania, cuestionando la capacidad de Zelenski para resolver un conflicto que, según él, “nunca tuvo que comenzar”.
El expresidente estadounidense cuestionó específicamente el desequilibrio en el apoyo financiero entre Estados Unidos y Europa, señalando que su país ha gastado USD 200 mil millones más que los aliados europeos, a pesar de que el conflicto afecta más directamente al continente europeo.
Las acusaciones de Trump incluyen señalamientos sobre la desaparición de parte de los fondos enviados a Ucrania, así como críticas a la decisión de Zelenski de no realizar elecciones durante el conflicto, a pesar de que recientes encuestas del Instituto Internacional de Sociología de Kiev muestran un 57% de aprobación para el líder ucraniano.
La tensión diplomática se intensificó con la llegada a Kiev de Keith Kellogg, el nuevo enviado de Trump para Ucrania y Rusia, coincidiendo con una reunión histórica entre el secretario de Estado Marco Rubio y el canciller ruso Serguei Lavrov en Arabia Saudita, sin la participación de Ucrania ni representantes europeos.
Trump afirmó estar “negociando con éxito” el fin de la guerra, una declaración que genera preocupación entre los aliados europeos, que temen un acuerdo que no considere sus intereses ni los de Ucrania.
Las críticas de Trump sobre la legitimidad de Zelenski hacen eco de la retórica del presidente ruso Vladimir Putin, quien constantemente cuestiona la autoridad del líder ucraniano para firmar un acuerdo de paz.
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Esta escalada verbal ocurre en un momento crítico para Ucrania, que enfrenta desafíos significativos en el campo de batalla y depende fuertemente del apoyo militar y financiero occidental para mantener su resistencia contra la invasión rusa.
La situación se complica aún más considerando que Putin, quien critica la legitimidad de Zelenski, ha modificado la constitución rusa para permanecer en el poder hasta 2036, en un proceso electoral criticado por observadores independientes.
Fuente: Clarín
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