Un nuevo capítulo se suma al Operativo Cross con la entrega del oficial Lucas Gabriel Riveros Coronel (31), quien se encontraba prófugo desde el 15 de febrero por su presunta vinculación con una red internacional de narcotráfico que opera en el departamento de Ñeembucú.
El uniformado, quien ejercía como jefe de la Comisaría 16ª de Cerrito, se presentó ante la Unidad Especializada en la Lucha Contra el Narcotráfico en Asunción, elevando a 14 el número total de detenidos en esta investigación desarrollada por la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y el Ministerio Público.
Prosecución Cross ️
Se rindió a la justicia el Oficial Primero Lucas Riveros Coronel, jefe de la Comisaría de Cerrito
Se le atribuye la responsabilidad de apoyo logístico y protección a los miembros de la organización criminal de tráfico aéreo de cocaína asentada en Ñeembucú. pic.twitter.com/BkJLPdQNX7
— SENAD Paraguay (@senad_paraguay) February 20, 2025
Según las investigaciones, Riveros Coronel habría proporcionado cobertura y seguridad al esquema de tráfico de cocaína, además de facilitar gestiones para el uso del aeródromo municipal de Cerrito para el aterrizaje de avionetas con cargamentos ilícitos.
La detención se suma a la de otro oficial de policía, Lucas Vera Bordón, quien según los investigadores desempeñó un papel crucial en la estructura criminal. Ambos uniformados habrían participado en la localización de droga lanzada desde aeronaves y proporcionado refugio a pilotos involucrados en operaciones fallidas.
El caso, investigado por los fiscales Ingrid Cubilla, María Irene Álvarez, Pamela Pérez y Cristian Ortiz, ha revelado una compleja red dedicada a recibir cargamentos de cocaína procedentes de Bolivia, con destino final a Argentina y Uruguay.
Las investigaciones están vinculadas al accidente de una aeronave Cessna 210 ocurrido el 17 de diciembre de 2024 en el aeródromo de Cerrito, así como al operativo Perla Negra, que resultó en la incautación de 456,7 kilos de cocaína y la detención de seis personas.
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La participación de oficiales de policía en esta red criminal ha generado preocupación sobre la infiltración del narcotráfico en las fuerzas de seguridad, especialmente en zonas fronterizas estratégicas para el tráfico internacional de drogas.
Este nuevo desarrollo en el Operativo Cross evidencia la complejidad de las redes de narcotráfico que operan en la región y el desafío que representa para las autoridades la corrupción dentro de las propias fuerzas del orden.
Fuente: Última Hora
