Gentileza Agencia IP.
El Gobierno Nacional implementará próximamente un ambicioso plan de descentralización del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert) que dividirá la operativa institucional en cuatro regiones estratégicas: Sur, Norte, Centro y Este. Esta reorganización territorial forma parte de una iniciativa presidencial que busca potenciar el exitoso método de Barrido Predial Masivo para alcanzar la meta de 50.000 títulos de propiedad durante la administración del presidente Santiago Peña, según informó el titular del Indert, Francisco Ruiz Díaz.
La iniciativa, considerada uno de los proyectos emblemáticos del actual gobierno, contará con supervisión directa desde la oficina de proyectos prioritarios de la Presidencia de la República. El plan ya fue presentado oficialmente al presidente del Congreso, Basilio Núñez, durante una ceremonia de entrega masiva de títulos realizada en marzo pasado en la ciudad de Coronel Oviedo, demostrando el compromiso gubernamental con la formalización de la propiedad rural.
La nueva estructura operativa establecerá divisiones regionales específicas para optimizar la gestión territorial. La División Sur abarcará los departamentos de Ñeembucú, Misiones e Itapúa; la División Norte incluirá San Pedro, Amambay y Concepción; la División Centro cubrirá Guairá, Caazapá y Paraguarí; mientras que la División Este integrará Cordillera (colonias con lotes rurales), Caaguazú, Alto Paraná y Canindeyú. Adicionalmente, se creará una División de Asentamientos Rurales para atender al departamento Central y zonas específicas de Cordillera con características similares a áreas urbanas.
Con esta reorganización, el gobierno aspira a establecer un récord histórico en materia de titulación rural, superando ampliamente los 22.561 inmuebles titulados durante la administración del presidente Juan Carlos Wasmosy (1993-1998). El enfoque estratégico no solo busca incrementar los números, sino también reducir la inequidad en la distribución de la propiedad, especialmente favoreciendo a las mujeres rurales. Las estadísticas demuestran un avance significativo en este aspecto: mientras que anteriormente solo tres de cada diez títulos se otorgaban a mujeres, actualmente más del 50% de los beneficiarios pertenecen al género femenino.
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Para facilitar el acceso a la titulación, el gobierno implementó importantes medidas financieras que incluyen la reducción de la tasa de interés del 12% al 0% para mujeres y del 12% al 4% para varones. Estas condiciones preferenciales buscan democratizar el acceso a la propiedad rural y consolidar uno de los mecanismos más efectivos para combatir la pobreza en el campo: la seguridad jurídica sobre la tierra. La titulación formal permite a las familias rurales acceder a créditos, implementar mejoras productivas y planificar inversiones a largo plazo.
El compromiso con la equidad rural se refleja también en el reciente proyecto de ley presentado para ampliar el plazo de financiamiento de 15 a 25 años para mujeres, sin intereses, y de 10 a 20 años para varones. Esta modificación normativa reducirá significativamente el valor de las cuotas mensuales, haciendo más accesible el proceso para miles de familias campesinas. El conjunto de estas medidas demuestra una política integral que combina la eficiencia administrativa con la inclusión social, priorizando a los sectores históricamente más vulnerables del Paraguay rural.
Fuente: Agencia IP
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