Un trágico accidente ocurrido sobre Acceso Sur y Cabo Dionisio Comet en Ñemby terminó con la vida de Maurizzio Marcelo Sebastián Paniagua Velázquez, de 29 años. El joven aguardaba en el carril rápido de la ruta PY01 para cruzar al sentido contrario cuando fue embestido por una unidad de la Línea 47, perteneciente a la empresa Automotores Guaraní SRL.
Según el informe policial, el colectivo, conducido por Rubén Darío Samaniego Acosta, impactó violentamente contra el vehículo detenido, provocando la muerte inmediata del joven. Las imágenes de circuito cerrado muestran cómo el bus se aproxima a alta velocidad sin realizar maniobras de frenado previas al impacto.
Familiares reclaman justicia y responsabilidad
Tras el accidente, los familiares de la víctima reclaman justicia y exigen que los responsables de la empresa de transporte se hagan cargo de la tragedia. Laura Paniagua, hermana del fallecido, denunció públicamente la falta de acompañamiento y responsabilidad por parte de la empresa.
La familia destacó el profundo dolor que deja la pérdida de Maurizzio, quien era padre de dos niños de 3 y 5 años que ahora quedan huérfanos. Los allegados insisten en que el siniestro se produjo por la imprudencia y la velocidad excesiva del colectivo en un horario con escaso tráfico.
Todavía ni sepultan al fliar y en lo que piensan es en la indemnización. Ni siquiera les importa meter preso al chófer, la indemnización de la empresa es lo que importa. https://t.co/wH5YJVjgr4
— ARIHEL OCAMPOS. (@ZAZKE__PY) April 29, 2025
De acuerdo con los testimonios de los familiares, hasta el momento Automotores Guaraní SRL no se ha comunicado ni ha ofrecido asistencia a los afectados. Esta actitud ha generado mayor indignación en la familia de la víctima, que ahora reclama no solo justicia penal contra el conductor, sino también responsabilidad civil de la empresa.
El pedido se centra en lograr que los responsables asuman las consecuencias del accidente y brinden apoyo a los hijos menores del fallecido, quienes enfrentan ahora una situación de vulnerabilidad.
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El caso reabre el debate sobre la falta de controles en el sector del transporte público, especialmente en lo que respecta a la velocidad y las condiciones de seguridad de los vehículos. Organizaciones ciudadanas insisten en la necesidad de fortalecer los mecanismos de fiscalización para evitar que hechos similares sigan ocurriendo.
Mientras tanto, la familia de Maurizzio Paniagua Velázquez continúa exigiendo respuestas y sanciones ejemplares, en busca de justicia y reparación para sus sobrinos.
Fuente: El Nacional
