Foto: Cage Skidmore | Paul Kagame
En una decisión que podría marcar un nuevo rumbo para la economía global, Estados Unidos y China anunciaron este lunes una tregua comercial de 90 días con una reducción sustancial de los aranceles que ambas potencias se venían aplicando en los últimos meses.
Según un comunicado conjunto, Washington reducirá los aranceles sobre productos chinos del 145% al 30%, mientras que Pekín hará lo propio al bajar a productos estadounidenses del 125% al 10%. La medida, que entra en vigencia desde este lunes, busca abrir una nueva ventana de diálogo que permita renegociar los términos comerciales entre las dos principales economías del mundo.
La conferencia de prensa conjunta en Ginebra, encabezada por el secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, dejó en claro que ambas partes reconocen que la guerra comercial estaba generando efectos adversos.
Otro de los puntos clave del acuerdo es la decisión de China de suspender las restricciones a la exportación de tierras raras, materiales esenciales para industrias estratégicas como la automotriz, la aeroespacial y la tecnológica. La medida fue bien recibida por los mercados: el índice de Hong Kong subió un 3%, al igual que el de futuros del S&P 500.
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El anuncio fue interpretado como un nuevo retroceso de la política agresiva de aranceles impuesta durante el mandato de Donald Trump. El analista, Mark Williams, de Capital Economics, señaló que este acuerdo es “otra retirada sustancial de la agresiva postura de la administración Trump”.
Fuente: Xataka
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