Primer encuentro de pytyvõhára (facilitadores comunitarios) en la redacción de El Surti en Asunción (Crédito: Milena Coral).
El proyecto AIkuaa, liderado por Alejandro Valdez Sanabria y Sebastián Auyanet, es una iniciativa cultural y tecnológica impulsada desde Paraguay. Surge como una respuesta concreta para incluir el idioma guaraní en el desarrollo de inteligencia artificial.
AIkuaa —un juego de palabras que une “IA” con “ikuaa”, que en guaraní significa “saber”, algo así como “yo sé IA”— es desarrollado por el medio digital El Surti. Su objetivo es crear y fortalecer bases de datos abiertas de voz en guaraní, una de las lenguas oficiales de Paraguay y una de las más habladas del continente.
El proyecto combina recolección comunitaria de datos con tecnología aplicada, desarrollando sistemas de reconocimiento de voz y asistentes conversacionales en guaraní. Con ello, se busca cerrar la brecha digital que afecta a hablantes de lenguas orales.
El proyecto nació ante una realidad concreta: las lenguas indígenas, como el guaraní, están subrepresentadas en los grandes modelos de lenguaje. Esta exclusión limita el acceso digital de millones de hablantes y debilita sus derechos lingüísticos.
Para revertir esa brecha, Aikuaa organiza mingas comunitarias —encuentros presenciales inspirados en prácticas ancestrales de trabajo colectivo— donde se recolectan audios para entrenar sistemas de reconocimiento de voz en guaraní.
Los datos recolectados se integran a Common Voice, la plataforma colaborativa de Mozilla. Cada minga incluye facilitadores capacitados, conocidos como pytyvõhára, quienes guían las actividades y garantizan la diversidad de acentos, tonos y generaciones.
El enfoque del proyecto no es únicamente tecnológico, sino profundamente cultural. Reconoce que una lengua no es solo un conjunto de sonidos, sino una forma de interpretar el mundo. Por eso, el diseño de las herramientas respeta los usos orales del guaraní.
Uno de los principales retos ha sido adaptar las interfaces digitales a lenguas no escritas. Muchas personas hablantes del guaraní se comunican principalmente de forma oral, lo que exige metodologías híbridas entre tecnología y tradición.
Además del reconocimiento de voz, Aikuaa también trabaja en un chatbot en guaraní que interactúa con usuarios reales. Este asistente responde consultas, gestiona suscripciones y fortalece el vínculo entre medios y comunidades.
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La construcción de esta infraestructura idiomática es parte de una visión más amplia: democratizar el acceso a la IA desde el Sur Global, empoderando a comunidades que históricamente han quedado fuera del diseño tecnológico.
El Surti busca que su experiencia sea replicable por otras organizaciones de medios y cultura. Para eso, desarrolla una metodología abierta, basada en el aprendizaje colectivo y la sostenibilidad comunitaria.
Con Aikuaa, la inteligencia artificial se convierte en una excusa para conectar, compartir y fortalecer identidades. En lugar de reemplazar el contacto humano, lo multiplica a través del lenguaje.
Fuente: JournalismAi
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