El Gobierno de Paraguay sigue de cerca la aplicación del nuevo esquema arancelario anunciado por Estados Unidos bajo la administración de Donald Trump, que impone un gravamen del 10% a productos paraguayos. Las medidas entran en vigencia este jueves 7 de agosto.
El titular del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), Carlos Fernández Valdovinos, señaló que, pese a la incertidumbre internacional, aún no es necesario tomar medidas de política económica local en respuesta a esta decisión.
El ministro explicó que la administración estadounidense muestra un comportamiento impredecible, lo que puede traducirse en futuras modificaciones a los aranceles recién anunciados, tal como ocurrió anteriormente con otros países.
Recordó que las tarifas originalmente altas impuestas a socios como Brasil, Canadá o México fueron luego moderadas o reducidas mediante exoneraciones parciales. Por esa razón, instó a esperar antes de ajustar políticas internas como el déficit fiscal o la tasa de interés.
El impacto para Paraguay es menor en términos arancelarios, ya que se encuentra entre los países con balanza comercial favorable para EE.UU., lo que le coloca en el grupo de naciones sujetas a un arancel del 10%, y no del 30% como otros socios estratégicos.
Fernández Valdovinos destacó que, aunque el entorno global es inestable, Paraguay mantiene una proyección de crecimiento económico superior al 4% para este año. En ese contexto, recomendó mantener la prudencia y evitar respuestas prematuras.
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El MEF continuará monitoreando la evolución de las medidas y sus posibles efectos sobre el comercio exterior. La estrategia, por ahora, consiste en preservar la estabilidad macroeconómica sin alterar los instrumentos fiscales y monetarios.
Finalmente, el funcionario subrayó la importancia de seguir centrados en la economía local, sin dejarse llevar por reacciones especulativas que podrían afectar negativamente la recuperación y expansión proyectada para el cierre del 2025.
Fuente: Última Hora
