El recientemente designado embajador de Paraguay ante Estados Unidos, Gustavo Leite. Foto: Juan Pablo Pino
El embajador de Paraguay en Estados Unidos, Gustavo Leite, rechazó categóricamente el informe del Departamento de Estado estadounidense que señala retrocesos en materia de libertad de expresión en territorio paraguayo. El diplomático calificó el documento como inexacto y anunció que buscará aclarar las imprecisiones durante su gestión en Washington. Leite manifestó su intención de corregir la información contenida en el reporte oficial. La postura del representante diplomático paraguayo marca el inicio de una estrategia defensiva ante las críticas internacionales.
“Es una de las cosas que me voy a ir a averiguar, a investigar, a corregir las cosas, porque hay inexactitudes, hay imprecisiones en ese informe”, declaró Leite en una entrevista con ABC Cardinal. El embajador enfatizó que el documento contiene información errónea que debe ser rectificada ante las autoridades estadounidenses. “Basta leer qué es lo que dice, porque es un párrafo largo… Hay muchas cosas que no son ciertas”, agregó. Sus declaraciones reflejan el malestar oficial por el contenido del informe.
El informe del Departamento de Estado acusa al Congreso paraguayo de adoptar medidas dirigidas contra organizaciones no gubernamentales y medios de comunicación. Según el documento, las comisiones parlamentarias fueron utilizadas para intimidar con acusaciones falsas y amenazas de sanciones a periodistas y activistas. Las autoridades estadounidenses identificaron un patrón sistemático de restricciones a la libertad de prensa en Paraguay. El reporte forma parte de la evaluación anual sobre derechos humanos que realiza el gobierno de Estados Unidos.
Leite negó enfáticamente la existencia de amedrentamientos o amenazas contra periodistas en territorio paraguayo. “Acá no hubo nunca amedrentamiento, acá no hubo nunca amenazas, acá no hubo denuncias de corrupción”, sostuvo el embajador durante la entrevista radial. El diplomático comparó la situación con las denuncias de corrupción realizadas por el propio presidente Donald Trump y el secretario de Estado Marco Rubio. Esta declaración busca relativizar las críticas estadounidenses mediante la comparación con problemas internos de Estados Unidos.
El representante diplomático paraguayo adelantó que exigirá explicaciones formales al gobierno estadounidense sobre las fuentes utilizadas para elaborar el informe. “Una de las primeras cosas que tendré que hacer es entender de dónde salen las fuentes para ese informe”, manifestó Leite. El embajador consideró fundamental conocer los mecanismos de recopilación de información empleados por el Departamento de Estado. Su estrategia incluye cuestionar la metodología utilizada para evaluar la situación paraguaya.
“Nosotros vamos a defender todo lo que se hizo. Y lo que se hizo, se hizo bien, se hizo a la luz del día, se hizo con las cámaras de todos y se puede mirar”, enfatizó el diplomático paraguayo. Leite resaltó que Paraguay tendrá su oportunidad de responder al informe y expresar su postura oficial ante las autoridades estadounidenses. El embajador insistió en la transparencia de las acciones gubernamentales paraguayas. Sus declaraciones buscan contrarrestar las percepciones negativas generadas por el reporte oficial.
El embajador solicitó que Paraguay sea consultado antes de la publicación de futuros informes oficiales estadounidenses. “Señores del Departamento de Estado, cuando van a emitir algo sobre Paraguay, acá estamos. Quisiéramos ser parte, quisiéramos tener nuestra voz”, expresó Leite. El diplomático consideró que la falta de consulta previa constituye un error procedimental que debe corregirse. “Luego de escucharnos, ustedes pueden escribir lo que quieran, pero por lo menos escúchennos”, agregó el representante paraguayo.
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Leite también abordará las declaraciones estadounidenses que califican como “significativamente corruptos” a varios políticos paraguayos, incluyendo a Horacio Cartes y sus aliados. “Va a ser aclarado en la oportunidad que yo tenga cuando presente formalmente mis cartas credenciales, que será dentro de los próximos 15 días en el Departamento de Estado”, indicó el embajador. El diplomático confirmó que conversó con el canciller paraguayo sobre este tema específico. Las designaciones estadounidenses representan un punto de tensión adicional en las relaciones bilaterales.
El embajador reconoció su sorpresa por el contenido del informe, aunque atribuyó su malestar principalmente a la falta de consulta previa. “Por supuesto que estamos sorprendidos por lo que salió, pero más que por lo que salió, por la inconsulta”, manifestó Leite. El diplomático definió su misión como la de posicionar la imagen paraguaya en diferentes instancias del poder estadounidense. “El Departamento de Estado es la puerta de entrada, pero en Estados Unidos hay muchas instituciones que comparten el poder”, concluyó el representante paraguayo.
Fuente: ABC Color
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