Funcionarios de Cañas Paraguayas, también reclamaron por pago de sus salarios y por fraude al seguro de IPS.
La crisis en las empresas públicas Capasa y Copaco se profundizó tras las manifestaciones de trabajadores que reclaman el pago de salarios atrasados por varios meses. Los funcionarios denuncian abandono estatal y cuestionan la gestión de los administradores designados por el gobierno de Santiago Peña.
Javier Villalba, representante del Sindicato de Trabajadores de Capasa, confirmó que los empleados no perciben salarios desde mayo pasado. La empresa acumula dos meses de atraso en haberes y desde octubre de 2024 carece de cobertura del IPS, pese a los descuentos realizados mensualmente a los trabajadores.
La fábrica de Cañas Paraguayas permanece paralizada por falta de recursos, insumos y materia prima. Los proveedores suspendieron entregas debido a deudas acumuladas por la anterior administración, según explicó el dirigente sindical que responsabiliza a la gestión de José Ocampo por la actual situación.
Los trabajadores solicitaron audiencias con el presidente Santiago Peña, el presidente del Congreso Basilio Núñez y el titular de Diputados Raúl Latorre, pero no obtuvieron respuesta. Esta falta de atención gubernamental genera mayor incertidumbre entre los 170 funcionarios de la empresa cañera.
Villalba denunció que Capasa está siendo “prácticamente dejada de lado” y cuestionó la permanencia de José Ocampo en el directorio pese a su cuestionada gestión. También criticó la “inacción” del síndico titular Nelson Galván ante la crisis que atraviesa la empresa estatal.
Las pérdidas de Capasa se duplicaron durante 2024 bajo la administración Ocampo, pasando de 2.379 millones de guaraníes en 2023 a 5.546 millones. Esta situación financiera agravó las condiciones laborales y generó desconfianza entre los trabajadores sobre el futuro de la empresa.
Los funcionarios exigen a la Procuraduría General seguimiento a las denuncias por presuntos hechos punibles, incluyendo estafa. Los empleados fueron perjudicados por descuentos del seguro social que no llegan al IPS, impidiendo el acceso a atención médica y derechos jubilatorios.
Rolando Melgarejo, secretario general del Sindicato de Trabajadores de Copaco, informó que la empresa telefónica abonó los sueldos de junio la semana pasada, pero mantiene pendientes julio y agosto. Esta situación afecta a aproximadamente 2.500 trabajadores y sus familias.
El dirigente de Copaco expresó preocupación por la ausencia de proyectos que permitan una salida a la crisis financiera. Acusó al administrador Oscar Stark de no presentar propuestas concretas pese a que el sindicato entregó un plan hace un año y siete meses sin obtener respuesta.
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Melgarejo calificó la crisis como “insostenible” y generadora de “inestabilidad emocional” entre los trabajadores. Solicitó al presidente Peña la salida del administrador de Copaco y anunció que trabajarán con asesores jurídicos para buscar soluciones de fondo a la crisis empresarial.
El dirigente advirtió sobre la convocatoria a una asamblea para definir un eventual paro general como “última etapa” de las medidas de protesta. Esta decisión se enmarca en la búsqueda de alternativas legales para presionar al gobierno ante la falta de respuestas a los reclamos salariales y de gestión.
Fuente: ABC Color
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