Una investigación realizada por una universidad canadiense encendió las alarmas sobre los peligros que pueden representar algunos videojuegos infantiles. El estudio analizó 249 títulos, entre ellos Roblox, y concluyó que existen dos riesgos centrales: la adicción generada por algoritmos diseñados para retener a los usuarios y la facilidad de contacto con pedófilos y pederastas a través de estas plataformas.
El informe detalla que ciertos estímulos visuales, como la caída de monedas en pantalla, imitan las dinámicas de los casinos. Esta similitud llevó al gobierno de Canadá a revisar y elevar la clasificación etaria de algunos de estos juegos, que anteriormente eran considerados aptos para niños pequeños.
Las advertencias coinciden con estudios previos de universidades estadounidenses que ya habían puesto la lupa sobre el impacto psicológico de estas plataformas y la exposición de menores a contenidos inapropiados.
Por otro lado, el especialista en ciberseguridad Miguel Ángel Gaspar recomendó a los padres limitar el tiempo de uso de dispositivos móviles y activar los controles parentales no solo en las aplicaciones, sino también en todos los equipos conectados del hogar. Además, subrayó la importancia de fomentar la confianza entre padres e hijos para que los menores no busquen orientación en herramientas de inteligencia artificial, sino en adultos responsables.
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Gaspar recordó que la prevención no debe recaer únicamente en las familias. Señaló que las escuelas también deben fortalecer la supervisión digital, ya que en el último mes atendió entre 11 y 12 casos en instituciones educativas relacionados con pornografía infantil y suplantación de identidad.
El experto aclaró que el objetivo no es demonizar los videojuegos, sino reconocer que no todos son adecuados para los más pequeños y que requieren de una supervisión constante para evitar que se conviertan en una puerta de entrada a riesgos mayores.
Fuente: Megacadena
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