Zurdazo al ángulo del extremo Joel Román, imposible para Alexis Martín Arias, en el gol que aseguró la victoria del Triqui. Foto: Fernando Romero.
Cerro Porteño cayó en casa ante Sportivo Trinidense y perdió su invicto en el torneo Clausura. El triunfo por 3-1 en La Nueva Olla dejó al equipo azulgrana sin margen de error, mientras que el Triqui celebró un golpe de autoridad que lo posiciona como animador del campeonato.
El inicio mostró al Ciclón con mayor posesión y ambición ofensiva. La primera diferencia llegó tras una falta sobre Iturbe en el área de Trinidense, detectada por el VAR. Federico Carrizo ejecutó el penal con seguridad para poner en ventaja al local y encender a la afición en Barrio Obrero.
Sin embargo, el cuadro de José Gabriel Arrúa no se apartó de su libreto. Con un planteamiento pragmático y ordenado, encontró la igualdad también desde los doce pasos. Fernando Romero se encargó de anotar con un remate al centro de la portería de Jean Fernandes Arias, luego de una falta sancionada sobre Melgarejo.
En la complementaria, Trinidense ajustó líneas y aprovechó los espacios que dejó Cerro por el sector izquierdo. Un robo de balón de Rayer a Carrizo permitió una rápida transición que terminó con la asistencia de Camacho para Ronaldo Báez. El delantero resolvió con un disparo cruzado que puso el 2-1 parcial.
El Ciclón buscó la reacción, pero el golpe anímico de la expulsión de Carrizo complicó la idea táctica de Diego Martínez. La falta de efectividad en los metros finales hizo evidente la crisis ofensiva azulgrana, mientras Trinidense capitalizaba cada error.
El tercer gol del Triqui llegó en los minutos finales y fue una muestra de eficacia colectiva. Rayer volvió a ser protagonista con un pase profundo a Báez, quien habilitó a Román. El zurdazo del atacante se incrustó en el ángulo y silenció a La Nueva Olla, asegurando la victoria visitante.
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En conferencia, el técnico Diego Martínez reconoció que la expulsión condicionó al equipo y lamentó las ocasiones desperdiciadas para ampliar la ventaja. Del otro lado, Arrúa explicó que su estrategia fue cerrar el circuito de juego en el medio y aprovechar los espacios que Cerro dejó en la segunda parte.
La victoria de Trinidense no solo corta la racha del líder, sino que lo impulsa en la tabla y confirma el crecimiento del plantel en el Clausura. Para Cerro Porteño, la derrota plantea la necesidad de replantear su funcionamiento ofensivo y sostener su liderato bajo presión.
Fuente: ABC Color
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