Santiago Peña y Lula da Silva, presidentes de Paraguay y Brasil, respectivamente. Foto: Presidencia.
El exembajador de Brasil en Estados Unidos y Reino Unido, Rubens Barbosa, advirtió que la alianza entre Paraguay y el gobierno de Donald Trump puede traer consecuencias directas para los intereses brasileños. Sus declaraciones se producen en medio de la crisis diplomática entre Washington y el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, marcada por los aranceles punitivos del 50% a productos brasileños y la cancelación de la visa del ministro de Justicia, Ricardo Lewandowski.
Barbosa señaló que el alineamiento de Paraguay con Estados Unidos plantea un desafío para la política exterior brasileña, particularmente en torno a las negociaciones por el Anexo C de Itaipú. El diplomático mencionó que, si Estados Unidos busca acceder a la energía excedente paraguaya, Brasil podría ver limitado su acceso prioritario, un punto clave del tratado binacional.
El exembajador también citó los acuerdos recientes entre Asunción y Washington, como la instalación de una base en la Triple Frontera con apoyo del FBI, la cooperación en seguridad e inteligencia, el memorándum para el asilo de inmigrantes y la colaboración en áreas de minería, tecnología y energía.
En este sentido, Barbosa destacó las declaraciones del secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, quien planteó el uso de la energía excedente de Itaipú para instalar centros de datos de inteligencia artificial, aprovechando los bajos costos eléctricos del Paraguay. A su criterio, esta estrategia podría consolidar la influencia de las grandes tecnológicas estadounidenses en la región.
Leé más: Peña condecora al jefe del Comando Sur de EEUU
Además de Itaipú, el diplomático mencionó que la crisis entre Brasil y Estados Unidos podría beneficiar a Paraguay, ya que más empresas brasileñas podrían trasladar sus operaciones para exportar desde territorio paraguayo y evitar los altos aranceles. Actualmente, más de 1.000 firmas brasileñas ya operan bajo ese modelo, aprovechando ventajas impositivas y energéticas.
Barbosa advirtió también sobre el sesgo ideológico de la política exterior estadounidense, que busca fortalecer gobiernos de derecha en la región, como en El Salvador, Paraguay, Argentina y Bolivia, con el objetivo de contrarrestar el avance de administraciones de izquierda. Recordó que, en el pasado, el canciller paraguayo Rubén Ramírez fue impulsado como candidato de Estados Unidos a la Secretaría General de la OEA, aunque su aspiración fue bloqueada por Brasil.
Unite a nuestro canal de Whatsapp
El diplomático subrayó, sin embargo, que Paraguay sigue siendo un socio estratégico para Brasil, tanto en el sector sojero como en el comercio exterior, la hidrovía Paraná-Paraguay y la propia represa de Itaipú, considerada símbolo de integración regional.
Barbosa concluyó que, si bien Paraguay puede capitalizar el contexto internacional para atraer inversiones, la creciente cercanía con Trump podría derivar en un reacomodo de fuerzas en el Cono Sur, con impactos en la relación bilateral Brasil-Paraguay y en la estabilidad del Mercosur.
Fuente: Última Hora
Esta web usa cookies.