Un nuevo reglamento de disciplina comenzó a aplicarse en las 5.100 escuelas públicas de El Salvador, bajo directrices de la capitana Karla Trigueros, recién nombrada ministra de Educación en el gobierno de Nayib Bukele. La normativa establece que los alumnos deben saludar al docente al ingresar al aula, usar expresiones de cortesía como “por favor” y “gracias”, además de cumplir con estrictas reglas de vestimenta y corte de cabello.
La medida se enmarca dentro de un paquete de reformas impulsadas en las últimas semanas, que buscan imponer mayor control en los centros educativos. Según lo dispuesto, los estudiantes que acumulen 15 anotaciones de demérito por incumplir estas reglas no podrán ser promovidos de grado.
¡Excelente iniciativa de la Ministra @KarlaETrigueros! Con el Reglamento de Cortesía Escolar, El Salvador fomenta respeto y valores desde las aulas. “Buenos días”, “por favor” y “gracias” son básicos, pero se están perdiendo en el mundo. ¡@nayibbukele lidera el cambio real! pic.twitter.com/nafrLXtvHs
— David Baquero (@DavidBaquero1) August 25, 2025
El gremio docente reaccionó dividido. La maestra Sonia Guerrero, del Instituto Nacional Jaime Francisco López, sostuvo que estas normas aportan positivamente a la formación de los jóvenes. Sin embargo, la dirigente magisterial Idalia Zúñiga calificó el plan como una forma de “militarización de la educación pública”, señalando además que reprobar por conducta contradice la normativa de evaluación vigente en el país.
En el ámbito político, el analista independiente Carlos Araujo consideró que el nombramiento de una oficial militar al frente de Educación es otra muestra del autoritarismo del presidente Bukele. A su criterio, las reglas de “corte militarista” buscan controlar cada aspecto de la vida estudiantil y limitan la autonomía dentro de las escuelas.
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La propia ministra Trigueros, quien habitualmente viste uniforme de camuflaje, advirtió que los directores que no hagan cumplir las disposiciones serán sancionados. Como ejemplo, destituyó la semana pasada al director y al subdirector de un colegio capitalino tras difundirse un video en que estudiantes realizaban señas asociadas a pandillas, compartido por el propio mandatario en la red X.
Las medidas se enmarcan en el contexto de la política de seguridad de Bukele, cuya popularidad se sostiene en la reducción de la violencia ligada a las pandillas. No obstante, organizaciones de derechos humanos insisten en que la estrategia ha derivado en miles de detenciones arbitrarias, dejando dudas sobre la sostenibilidad de un modelo que ahora también alcanza al sistema educativo.
Fuente: ABC Color
