Eligio González Aponte. QEPD. Fotografía: Rodrigo Cardozo.
Eligio González Aponte, recordado como héroe civil del naufragio del Myriam Adela, falleció a los 91 años en la madrugada de este miércoles en Concepción. Su nombre quedó marcado en la memoria nacional tras su valentía en una de las peores tragedias acuáticas del país.
El 10 de febrero de 1978, el barco Myriam Adela se hundió en el río Paraguay debido a una tormenta repentina antes de llegar al puerto Kemmerich. El accidente dejó 113 víctimas fatales, siendo la mayor catástrofe de este tipo en el país. En ese contexto, Eligio, un trabajador de una estancia cercana, tomó su canoa y acudió al rescate de los sobrevivientes.
Logró salvar a unas 25 personas en dos viajes, pese a la limitada capacidad de su embarcación. Sus acciones lo convirtieron en un símbolo de solidaridad y valor, recibiendo años después el reconocimiento como héroe civil. Su testimonio fue recordado en varias entrevistas donde relataba que nunca dudó en actuar al escuchar los pedidos de auxilio.
En sus últimos años, González Aponte vivió con serias dificultades de salud. Hace más de una década había perdido la visión y en las últimas semanas permaneció internado en el Hospital Regional de Concepción. Según relató su sobrino, en los últimos días ya no podía alimentarse adecuadamente, lo que agravó su estado.
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La familia confirmó su deceso y pidió la colaboración de autoridades y ciudadanos para cubrir los gastos del sepelio. Además, señalaron que la vivienda de don Eligio, ubicada en el barrio San Antonio de Concepción, sufrió daños considerables tras el último temporal que azotó la ciudad.
El legado de González Aponte se mantiene vivo como un ejemplo de coraje civil. Su historia recuerda la importancia de la solidaridad en momentos de desastre y su nombre quedará vinculado para siempre a la memoria del naufragio del Myriam Adela, episodio que marcó profundamente a Paraguay.
Fuente: ABC Color
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