Actividad. Esta mañana se realiza un censo de internos condenados y prevenidos en el Penal de Tacumbú. Foto: Gentileza PJ
Los jueces de Ejecución y funcionarios del Poder Judicial realizaron un censo en la Penitenciaría Nacional de Tacumbú. La actividad busca registrar con precisión a las personas condenadas y procesadas, y mejorar la gestión de los expedientes judiciales pendientes.
La jornada estuvo encabezada por la jueza de Ejecución Especializada de la capital, Sandra Kircchofer, y contó con la colaboración de personal de la Fuerza de Operaciones de la Policía Especializada (FOPE), la Comisaría 5ª Metropolitana y agentes penitenciarios. El operativo comenzó en horas de la mañana y se desarrolló bajo estrictas medidas de seguridad.
El censo tiene como propósito crear una base de datos actualizada sobre la situación jurídica de los internos. Con esta herramienta, el sistema judicial podrá agilizar los trámites vinculados a prisiones preventivas, condenas y solicitudes de beneficios procesales, optimizando así el control judicial dentro del penal.
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Durante el operativo, los internos fueron convocados en el tinglado central del penal, donde se organizaron en filas para su registro. El procedimiento se realizó con la presencia de funcionarios judiciales, supervisores penitenciarios y custodios de seguridad. El objetivo fue garantizar transparencia y orden durante todo el proceso.
En el marco de la actividad, se presentó también el cierre del proyecto “Por un trato digno a las personas privadas de libertad”. Esta iniciativa surgió tras constatar que los internos utilizaban botellas y cartones reciclados para ingerir alimentos. Como respuesta, los jueces y funcionarios judiciales impulsaron una colecta solidaria.
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Gracias a este esfuerzo, fueron entregados 2.200 tuppers y vasos a los reclusos. La donación fue impulsada por magistrados de Paraguarí, Central y Capital, junto con fiscales, defensores públicos y colaboradores del sistema de justicia. La entrega se realizó en el mismo evento del censo penitenciario.
Finalmente, las autoridades destacaron la importancia de promover la reinserción social de los internos. Como ejemplo, participaron siete reclusos de la Unidad Industrial Esperanza y un exinterno que actualmente trabaja en una panadería y regresó al penal para colaborar con sus antiguos compañeros, reafirmando el objetivo de brindar un trato digno y humano a las personas privadas de libertad.
Fuente: Última Hora
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