La Policía podrá detener al exintendente de Lambaré Roberto Cárdenas solo si la Fiscalía solicita un allanamiento a su casa. Foto: Gentileza.
Roberto Cárdenas, exintendente de Lambaré condenado a ocho años de cárcel por lesión de confianza, continúa en su domicilio sin cumplir la pena impuesta. Existe una orden de captura vigente a nivel nacional contra el político colorado, pero esta no se ha ejecutado debido a limitaciones legales en su alcance. La situación evidencia un vacío normativo que permite al condenado permanecer en libertad.
La jueza María Lidia Wyder explicó que la orden de captura contra Cárdenas se limita exclusivamente a la vía pública. La Policía Nacional puede detenerlo en barreras, patrullajes u otros operativos callejeros, pero no está facultada para ingresar a su vivienda. El alcance restringido de la medida impide que los agentes cumplan con la captura del exintendente mientras permanezca en su domicilio.
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Para que la Policía pueda ingresar a casas particulares, la Fiscalía debe disponer un allanamiento específico. Wyder subrayó que el juzgado ha cumplido jurisdiccionalmente con todo lo que establece la ley. La magistrada aclaró que la orden de captura por sí sola no otorga autorización para el ingreso a domicilios privados, siendo necesaria una orden judicial adicional para este procedimiento.
El expediente judicial llegó al juzgado de Wyder en el transcurso de este año. En ese momento se levantaron las medidas alternativas que tenía el político colorado, quien hasta entonces había gozado de beneficios que le permitían permanecer fuera de prisión. La resolución implicó el endurecimiento de las condiciones impuestas al condenado, pero no garantizó su efectivo cumplimiento carcelario.
La defensa de Cárdenas planteó una excepción de incompetencia ante el juzgado, alegando que la causa no se hallaba firme. El argumento buscaba retrasar o impedir la ejecución de la sentencia mediante recursos procesales. Sin embargo, posteriormente se ratificaron las resoluciones de la jueza de Ejecución Penal Especializado en Delitos Económicos y Corrupción, quien reiteró la orden de captura contra el exintendente.
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Cárdenas fue condenado por el desvío de más de 800 millones de guaraníes de la Municipalidad de Lambaré durante su gestión como intendente. La sentencia de ocho años de prisión por lesión de confianza se encuentra firme, pero el político colorado sigue en libertad aprovechando la limitación técnica de la orden de captura. El caso refleja las dificultades del sistema judicial para ejecutar condenas cuando los imputados permanecen en sus domicilios.
Fuente: Última Hora
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