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En el tránsito, los peatones tienen la prioridad: PMT aclara dudas sobre la convivencia vial

En Asunción, la ley establece que peatones y ciclistas tienen prioridad sobre los vehículos, aunque pocos conductores lo respetan.

Foto: Archivo Última Hora - Miguel Houdin

En Asunción, donde el tráfico se vuelve cada día más caótico, muchos conductores siguen manejando sin conocer quién tiene realmente la preferencia en los cruces o vías públicas. Ante este panorama, el inspector Daniel Cárdenas, jefe de Operaciones de la Policía Municipal de Tránsito (PMT), explicó el orden de prioridad establecido por la normativa local, desmintiendo la famosa “ley del mbarete” que aún domina en calles y avenidas.

De acuerdo con el artículo 137 de la Ordenanza 92/23 de la Municipalidad de Asunción, los peatones encabezan el orden de prioridad, seguidos por bicicletas, monopatines, triciclos o vehículos similares sin motor. Recién después vienen los conductores de vehículos motorizados.

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El peatón siempre es primero. Luego vienen los medios de transporte más vulnerables, y finalmente, el vehículo con motor”, aclaró Cárdenas. Agregó que la falta de respeto a esta jerarquía y el desconocimiento de la normativa son factores que agravan la inseguridad vial.

Respecto a los tipos de vías, el funcionario detalló que la jerarquía funcional se ordena de la siguiente manera: primero las autopistas, luego las avenidas, después las calles de sentido único y finalmente las de doble sentido. En cuanto a la pavimentación, el orden de preferencia es: asfalto u hormigón, adoquinado, empedrado y, en último lugar, tierra o terraplén.

El inspector también recordó que, cuando dos vehículos se cruzan en vías del mismo nivel —por ejemplo, dos calles de sentido único—, tiene prioridad el que aparece primero a la derecha. Si se trata de una calle de doble sentido y una de sentido único, el vehículo del sentido único tiene la preferencia.

Además, Cárdenas insistió en que las órdenes de los agentes de tránsito están por encima de cualquier semáforo o señal, y que el cartel de “PARE” implica detener completamente el vehículo. “No es tocar bocina y pasar. Ese tipo de conducta causa accidentes”, subrayó.

El uso del señalero también es obligatorio: a una velocidad de 40 km/h, el conductor debe activarlo al menos 50 metros antes de girar para advertir a los demás. “Tener licencia de conducir no es un trámite, es una responsabilidad. Uno se convierte en comandante del vehículo”, sostuvo el inspector.

Cárdenas concluyó que el objetivo de las ordenanzas no es sancionar, sino garantizar una circulación segura y fluida. “El espíritu de las normas es cuidar la vida de todos. No estamos solos en la vía; hay otras personas circulando a nuestro alrededor”, enfatizó.

Fuente: ÚH