Clorinda.
Durante años, el cruce cotidiano de compradores paraguayos sostuvo el comercio de Clorinda. Familias, transportistas y feriantes dinamizaban ambos lados del río con un flujo que integraba precios, servicios y logística. Ese movimiento mermó de forma sostenida y modificó el mapa de consumo de la frontera.
El presidente de la Cámara de Comercio de Clorinda, Mario Bernal, describió un cambio visible en la afluencia. Atribuyó la caída a largas demoras para ingresar por el Puente Falcón, con filas que se extienden por horas. En su evaluación, esa fricción desplazó parte del gasto hacia alternativas del lado paraguayo.
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El diagnóstico abarca más que mostradores y góndolas. Estaciones de servicio, restaurantes, transporte y ferias también registraron menor actividad. El circuito que conectaba compra, abastecimiento y retorno perdió ritmo por la congestión vehicular y la lentitud de los controles migratorios y aduaneros.
En paralelo, creció el movimiento en Nanawa por la mayor fluidez del cruce. Consumidores que antes optaban por Clorinda reorganizaron sus recorridos. La decisión, según el sector privado, responde a tiempos de espera más cortos y a una experiencia de paso menos incierta en horas de mayor tráfico.
Para revertir la tendencia, la Cámara de Comercio elaboró un proyecto técnico integral. Ingenieros y arquitectos diseñaron un esquema por etapas para ordenar la circulación de vehículos y peatones sin interrumpir el paso. El plano contempla mejoras viales y operativas para agilizar accesos y salidas.
La propuesta plantea optimizar los flujos de livianos y transporte, con carriles y señalética que reduzcan los cuellos de botella. El objetivo es recortar tiempos de espera y dar previsibilidad al cruce diario. Para el sector, la ejecución requiere inversión y coordinación interinstitucional sostenida.
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En el frente diplomático y empresarial, se programó una reunión con la Embajada argentina en Paraguay y la Cámara de Comercio Paraguayo-Argentina. La intención es abrir una mesa binacional que priorice acciones concretas y evalúe ajustes simultáneos en infraestructura y gestión fronteriza.
El enfoque de Clorinda apunta a recuperar el equilibrio con su par del otro lado del río. La premisa es que una frontera ágil redistribuye beneficios en ambos sentidos. Con un plan técnico disponible y canales de diálogo activos, el comercio local busca reencender su pulso y volver a competir en condiciones claras.
Fuente: Infonegocios
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