Evidencias incautadas en el laboratorio de procesamiento artesanal de cocaína en la ciudad de Ñemby.
Agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) allanaron una vivienda en el Barrio Pai Ñu de Ñemby, identificada como un laboratorio clandestino de procesamiento artesanal de cocaína. La intervención estuvo a cargo de efectivos de la Dirección de Inteligencia, quienes ingresaron al inmueble tras labores de seguimiento. El lugar operaba como punto de acopio y transformación de la droga para su posterior salida hacia la calle.
Durante el procedimiento fueron detenidos Aníbal Giménez Sosa, de 37 años, señalado como responsable de la carga de cocaína almacenada en la vivienda. También fue aprehendido Jorge Fabián Rodríguez Ruiz, de 34 años, identificado como el supuesto químico o “cocinero” encargado de manipular y procesar la sustancia ilícita. Ambos quedaron vinculados directamente al funcionamiento del laboratorio descubierto en Ñemby.
Unite al canal de RDN en Whatsapp
En el interior del inmueble, los intervinientes incautaron un total de 23 kilogramos de sustancias ilícitas ya listas o en etapa de preparación. Entre lo decomisado figuran 20 panes de cocaína que totalizan 20 kilos con 500 gramos, ocultos dentro de la casa. Además, se hallaron 2 kilos de polvo de mixtura en ollas y 500 gramos de cocaína en polvo guardados en una bolsa de polietileno.
Los agentes también encontraron 4 kilos con 600 gramos de una sustancia blanquecina a determinar, presumiblemente cafeína, distribuidos en seis paquetes. Este componente sería utilizado para adulterar la cocaína y aumentar el volumen del producto final antes de su distribución. Según el reporte de la Senad, la estructura montada en el domicilio evidenciaba un centro de adulteración con capacidad para abastecer a distribuidores urbanos de la zona.
Como parte de las evidencias fue incautado un automóvil Mercedes Benz de color gris, aparentemente empleado para el traslado de la droga ya adulterada hacia distintos puntos de venta. En la vivienda se encontraron además herramientas clave para el procesamiento artesanal, entre ellas una prensa hidráulica y una balanza de precisión. Estos elementos permitían prensar, pesar y estandarizar los cargamentos preparados en el lugar.
Los intervinientes también requisaron moldes con la figura de un delfín, un horno microondas y diversos utensilios utilizados para la mezcla y manipulación de las sustancias. La combinación de equipos, químicos y vehículos reveló el nivel de organización del laboratorio clandestino instalado en el Barrio Pai Ñu.
Fuente: ABC Color
Esta web usa cookies.