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La Municipalidad de Asunción suspendió las actividades de tres locales dedicados a la comercialización de menudencias en el barrio Tablada. La medida fue aplicada por la Dirección General de Gestión Ambiental debido al incumplimiento de las ordenanzas municipales 112 y 119, que regulan los procesos de pretratamiento de efluentes y las emisiones de olores. La intervención respondió a reclamos vecinales presentados desde hace meses por molestias vinculadas a olores, presencia de moscas y dificultades en la circulación vehicular generadas por camiones de gran porte.
La comitiva técnica fue encabezada por la ingeniera Rosario Godoy, jefa del Área de Recursos Hídricos y Suelo. La funcionaria informó que los establecimientos permanecerán suspendidos hasta completar sus procesos de regularización. Según explicó, las faltas detectadas incluyen la falta de un área de pretratamiento para efluentes antes de la conexión al sistema cloacal de Essap, tal como exige el Artículo 8 de la Ordenanza 112. Además, se verificaron emisiones de olores no permitidas, previstas en el Artículo 12 de la Ordenanza 119.
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Godoy señaló que la intervención busca que los responsables cesen las infracciones y adopten las medidas necesarias para cumplir con la normativa ambiental. Mencionó que en cada establecimiento se detallaron los pasos para subsanar las irregularidades y que la suspensión constituye el inicio del proceso administrativo. La documentación será remitida al Juzgado de Faltas para la aplicación de las sanciones correspondientes.
La Municipalidad ya había notificado previamente a los tres comercios. De acuerdo con la jefa de área, el equipo municipal realizó verificaciones en distintos momentos, solicitando documentos ambientales y revisando el cumplimiento de las ordenanzas vigentes. Tras constatar nuevas infracciones, se procedió a labrar el acta de intervención y a dictar la medida de urgencia que derivó en la suspensión temporal.
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Para retomar sus actividades, los responsables deberán mitigar los impactos negativos detectados y presentar un descargo ante la Municipalidad. Además, deberán incluir un programa de adecuación para asegurar el cumplimiento de las normas relacionadas con el manejo de efluentes y el control de olores. La funcionaria reiteró que la regularización es un paso obligatorio antes de la reapertura.
Finalmente, Godoy mencionó que este procedimiento también se aplica a otras empresas de la zona. El equipo municipal continúa realizando controles documentales y verificaciones ambientales para asegurar que los establecimientos operen bajo los parámetros exigidos por la normativa local.
RDN
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