Foto: Gentileza.
El Senado aprobó el Presupuesto General de la Nación 2026 tras una sesión extraordinaria que se extendió por más de doce horas. La Cámara Alta respaldó la versión ajustada por su Comisión de Hacienda, que agregó reprogramaciones equivalentes a unos G. 200.000 millones. Los cambios afectan áreas como Salud, Educación, Justicia Electoral, Desarrollo Social e IPS, además de incluir aumentos salariales y beneficios previstos en el proyecto original.
Las modificaciones obligan a que el documento vuelva a la Cámara de Diputados para una segunda vuelta. La normativa establece que el Senado tiene la última palabra en materia presupuestaria, con plazo hasta mediados de diciembre. El plan inicial asciende a G. 149,2 billones, lo que implica un aumento del 12% respecto al año anterior. De ese total, G. 74,7 billones corresponden al Gobierno central y G. 74,5 billones a entidades descentralizadas. El PGN contempla un déficit fiscal del 1,5% del PIB y habilita la emisión de bonos por US$ 1.303 millones.
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Durante el debate, el senador Eduardo Nakayama insistió en mejorar la calidad del gasto público. Señaló la necesidad de encarar reformas estructurales y cuestionó el desempeño de empresas estatales con resultados deficitarios. También mencionó que estas entidades representan una carga para las finanzas públicas y limitan la capacidad de priorizar inversiones en salud y educación.
Entre los incrementos aprobados figura un refuerzo de G. 92.000 millones para el Ministerio de Salud. Los recursos serán destinados al Programa de Alimentación Nutricional, a sistemas de agua, a la provisión de leche para adultos mayores en situación vulnerable y a hospitales como el del Quemado, Caaguazú e Ineram. También se sumaron G. 17.000 millones para el plan de letrina cero y para tareas de supervisión regional. En el caso del IPS, se incorporaron G. 45.000 millones para la recategorización salarial del personal de enfermería.
El Tribunal Superior de Justicia Electoral recibió nuevamente el monto de US$ 35 millones para el alquiler de máquinas de votación, además de un aumento de G. 10.000 millones. En contraste, se aplicaron recortes al Ministerio de Economía y Finanzas por G. 5.000 millones, al MOPC por G. 67.000 millones y a la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios por G. 5.000 millones. Estos fondos fueron redireccionados a áreas como Ineram, Niñez y Adolescencia y el Ministerio de Urbanismo, Vivienda y Hábitat.
Uno de los puntos más discutidos fue el presupuesto de la Gobernación de Central. Diputados había aprobado un aumento de G. 15.000 millones, pero en el Senado la bancada de Honor Colorado planteó una reducción de G. 5.000 millones.
El planteamiento generó un cruce entre legisladores por la situación del departamento y las necesidades de los municipios afectados. También hubo debates sobre el financiamiento a universidades.
La UNA recibirá G. 11.200 millones de los G. 30.000 millones solicitados, mientras que las instituciones del interior obtendrán G. 35.000 millones. Finalmente, se aprobaron los articulados propuestos por la Comisión de Hacienda, que incluyen nuevos apartados añadidos a la versión del Ejecutivo.
Fuente: ABC Color
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