Foto: Gentileza.
La Contraloría General de la República detectó un perjuicio económico de más de G. 2.207 millones en la Facultad de Ciencias Médicas de la UNA, luego de constatar que medicamentos e insumos vencidos permanecían almacenados en depósitos del Hospital de Clínicas. El hallazgo fue comunicado oficialmente a la institución, que ahora tiene cinco días hábiles para presentar su descargo.
El informe detalla que los productos vencidos incluyen fármacos oncológicos, respiratorios y una amplia variedad de insumos descartables, tanto adquiridos como donados por el Ministerio de Salud. Solo en medicamentos oncológicos se perdieron G. 140.886 millones, a los que se suman donaciones similares por G. 732.347 millones. También vencieron productos respiratorios por G. 53.636 millones y donaciones por G. 906.540 millones. Los insumos descartables aportan G. 214.675 millones más en pérdidas, junto con otras donaciones por G. 159 millones.
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La investigación, que abarcó el Ejercicio Fiscal 2024 hasta abril de 2025, expone un escenario de desorden administrativo que permitió el deterioro de insumos esenciales destinados a pacientes del sistema público. Según la Contraloría, las fallas en la gestión del depósito farmacéutico fueron determinantes para que una gran parte del stock terminara sin uso.
El reporte también revela problemas estructurales en el Departamento Central de Suministros Médicos Hospitalarios. El depósito auxiliar externo opera sin habilitación de la Dirección Nacional de Vigilancia Sanitaria, carece de extintores y no reúne las condiciones adecuadas para almacenar medicamentos y materiales sensibles.
Las deficiencias se replican en el área administrativa. La Farmacia Central no cuenta con Manual de Funciones ni un organigrama aprobado, mientras que la Farmacia Interna no utiliza el sistema informático disponible para registrar y entregar productos. Esto dificulta cualquier control del inventario y agrava la pérdida de insumos.
La Contraloría advierte que medicamentos vigentes fueron almacenados junto con productos vencidos, práctica que representa un riesgo sanitario. El documento concluye que la ausencia de controles y procedimientos permitió que insumos esenciales se desperdiciaran en lugar de llegar a los pacientes del Hospital de Clínicas.
Fuente: ABC Color
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