Foto: Rodrigo Villamayor.
El Mercado 4 atraviesa un nuevo desacuerdo entre comerciantes y la administración municipal, esta vez por el uso del espacio público y la interpretación de los límites marcados por la franja amarilla. Mientras un sector critica la gestión de Alejandro Buzó, otro la respalda y asegura que se están cumpliendo las normas.
La Asociación de Comerciantes cuestiona que se permita extender los puestos entre 10 y 30 centímetros más allá de lo establecido. “No objetamos el control, pero sí cualquier autorización informal para pasar el límite”, señaló Antonio Acosta, representante del grupo.
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Recordó que el artículo 17 de la Ordenanza 551/15 establece sanciones por este tipo de situaciones. Lourdes Gamarra, también miembro de la asociación, advirtió que el uso excesivo del espacio genera trabas en la circulación y en el abastecimiento de mercaderías.
Acosta también criticó que las instrucciones sobre los límites se den de forma verbal, sin documentos que respalden modificaciones al espacio, lo cual —dijo— va en contra del artículo 13 de la misma ordenanza. Para Gamarra, la gestión prioriza la imagen pública por encima del cumplimiento riguroso de las normativas.
Por su parte, el director del mercado, Alejandro Buzó, negó que se estén autorizando ampliaciones fuera de regla. Explicó que muchos puestos tienen estructuras removibles de hasta 40 centímetros que vienen siendo usadas desde hace años, y que su administración está trabajando en ordenar los espacios sin perjudicar la circulación. Calificó de infundadas las críticas sobre supuestos permisos irregulares.
Además, surgieron denuncias sobre presuntas ventas y habilitaciones de casillas sin autorización. Acosta afirmó que más de 30 casillas ya fueron retiradas por orden de la dirección y aseguró que algunas llegaron a venderse por montos millonarios.
Buzó negó que se estén entregando casillas de manera irregular y dijo que varios pedidos fueron rechazados desde su gestión. Admitió que entre 12 y 15 casillas sí fueron vendidas antes de que asumiera oficialmente el cargo, responsabilizando a funcionarios de la administración anterior.
Comerciantes y permisionarios también expresaron preocupación por la falta de mejoras en servicios básicos como sanitarios y calles internas. Ojeda mencionó la necesidad de reforzar la seguridad y advirtió sobre herreros que trabajan sin ningún tipo de control. Sobre este punto, Buzó respondió que el Grupo Lince mantiene presencia constante en el perímetro del mercado y que el patrullaje se sostiene las 24 horas.
Fuente: ÚH
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