Luis Bello en Asunción. Imagen generada con Gemini.
El intendente de Asunción, Luis Bello (ANR-HC), prepara un paquete de medidas para aumentar la recaudación municipal. Entre las acciones, propone vigilar con drones a contribuyentes y detectar construcciones no declaradas.
El plan apunta a reducir la evasión de impuestos y reforzar los ingresos en el corto plazo. Bello sostiene que necesita asegurar recursos para cubrir obligaciones inmediatas de la Municipalidad.
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En ese contexto, el jefe comunal impulsa un préstamo de G. 184.000 millones, equivalentes a USD 28 millones. La intención es destinar esos fondos al pago de aguinaldos y deudas que atribuye a la gestión del exintendente Óscar “Nenecho” Rodríguez (ANR-cartista).
El pedido de autorización para el endeudamiento ingresó a la Junta Municipal el jueves. La mayoría oficialista prevé aprobarlo en la sesión de hoy.
El uso de drones figura como una herramienta central del control tributario. La administración municipal busca identificar ampliaciones ilegales y construcciones que no fueron declaradas para ajustar los registros y los valores fiscales.
Además, se plantea medir la cartelería publicitaria y revisar terrenos baldíos. Con estos controles, la Municipalidad pretende actualizar la base imponible y aumentar la recaudación por tributos vinculados a inmuebles y publicidad.
Por otro lado, Bello propone una fiscalización cruzada con la ANDE, la ESSAP y la Dirección Nacional de Ingresos Tributarios (DNIT). El objetivo es ubicar propiedades o negocios no registrados y cerrar brechas de evasión.
En paralelo, la Intendencia prevé avanzar con embargos, acciones judiciales y remates contra grandes evasores. También considera vender carteras de deudas consideradas incobrables.
A esto se suma la exposición pública de morosos y su inclusión en listas negras. Incluso se menciona la posibilidad de cortar el servicio de recolección de basura a quienes mantengan deudas.
Mientras se anuncian controles más duros para contribuyentes comunes, la Municipalidad arrastra una deuda histórica del Estado por G. 396.239 millones. Ese monto supera ampliamente los G. 89.771 millones adeudados por los contribuyentes en general.
En lugar de aplicar medidas coercitivas para cobrar a organismos estatales, Bello propone una recuperación progresiva mediante negociación. La estrategia apunta a instalar un equipo político-técnico para lograr compensaciones.
El esquema financiero del préstamo prevé que la primera cuota venza en enero de 2026 por G. 58.876 millones. Para ese mes se estima una recaudación de G. 474.763 millones, según las proyecciones de la administración.
En febrero de 2026 vencería la segunda y última cuota, por G. 130.212 millones. Sin embargo, la recaudación estimada para ese mes es de solo G. 91.495 millones, lo que deja expuesto un desfasaje entre ingresos previstos y compromisos de pago.
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La garantía del acuerdo con los bancos se estructura mediante un fideicomiso. Este mecanismo habilita el débito diario de hasta el 100% de lo recaudado en tributos hasta completar las cuotas, por lo que durante los primeros días de enero y febrero la recaudación podría destinarse íntegramente al pago del préstamo.
El concejal Humberto Blasco (PLRA) advirtió que este esquema generaría “estrés” en las finanzas municipales. También alertó sobre “dificultades para honrar otros compromisos”, mientras exconcejales señalaron una posible ilegalidad del mecanismo.
Fuente: ABC Color
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