Brasil anunció la habilitación parcial del Puente de la Integración para el viernes 19, a las 15:00, con un acto previsto en Foz de Yguazú y la presencia del presidente Luiz Inácio Lula da Silva. La estructura une Presidente Franco, en Paraguay, con la ciudad brasileña. Sin embargo, del lado paraguayo no existe confirmación oficial del evento, pese a que se trata de una obra binacional clave para el tránsito fronterizo.
Según las comunicaciones oficiales brasileñas, la apertura será gradual y limitada en esta primera etapa. El cruce se habilitará solo para camiones de gran porte, pero en vacío. Además, aunque la pasarela está terminada y apta para todo tipo de vehículos, el paso intensivo aún no se considera viable por la falta de condiciones en la infraestructura de apoyo.
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Mientras Brasil concentra la organización del acto, en Paraguay se mantiene la incertidumbre institucional. Ni el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) ni la Itaipú Binacional, citados como responsables de la ejecución de las obras, reportaron estar al tanto de la ceremonia anunciada desde el país vecino. Por lo tanto, el anuncio brasileño contrasta con la ausencia de una comunicación formal paraguaya sobre fecha, modalidad y alcance del evento.
Además, no se implementó un sistema de acreditación para medios paraguayos. Esto implica que la cobertura periodística queda sujeta a la coordinación de las instituciones brasileñas. En términos operativos, ese detalle refuerza que la logística del primer acto de habilitación se está centralizando fuera del lado paraguayo del puente.
El factor principal sigue siendo la falta de obras complementarias. Del lado paraguayo, aún no está listo el Corredor Metropolitano del Este (CMDE). En particular, permanece en ejecución el puente sobre el río Monday, considerado un tramo clave para conectar el flujo vehicular hacia la nueva estructura internacional.
Del lado brasileño, el acceso está vinculado al Perimetral Leste. Las carreteras que integran ese sistema están prácticamente concluidas. Sin embargo, todavía faltan tareas de terminación y seguridad, como vallas de protección, señalización e iluminación, entre otras obras necesarias para ordenar el tránsito y reducir riesgos.
Por lo tanto, la habilitación anunciada para el 19 se presenta como una apertura parcial y condicionada. El inicio con camiones vacíos marca un esquema de prueba y control de circulación. A la vez, expone que la infraestructura disponible no acompaña aún el potencial del puente como vía de integración plena.
El proyecto del segundo puente con Brasil en Alto Paraná se remonta a 1992. La obra fue concluida hace tres años, pero su habilitación se postergó por la falta de obras complementarias. En este escenario, el anuncio brasileño reabre el debate sobre coordinación binacional, plazos y responsabilidad institucional en el lado paraguayo.
Fuente: Última Hora
