El ministro del Interior de Paraguay, Enrique Riera, defendió los ascensos policiales. Juan Pablo Pino
El ministro del Interior, Enrique Riera, defendió los ascensos de 34 jefes policiales aprobados por el Senado en su última sesión. Admitió que siete de los promovidos registraban antecedentes polémicos. Sin embargo, afirmó que todos los casos fueron aclarados y que los reclamos no tenían sustento administrativo ni judicial.
Riera explicó que los ascensos fueron propuestos por la Comandancia de la Policía Nacional. Indicó que el proceso incluye la evaluación del Tribunal de Calificaciones y el aval ministerial. Además, sostuvo que analiza cada nombre de forma individual antes de autorizar la lista final elevada al Congreso.
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Según el ministro, los antecedentes cuestionados no derivaron en condenas ni sanciones vigentes. Aseguró que, en varios casos, se identificó a otros responsables. Por lo tanto, los oficiales implicados fueron sobreseídos o nunca llegaron a ser procesados formalmente.
Riera detalló que la Comandancia presenta los nombres y expone los antecedentes en su despacho. Señaló que el Comando Institucional explica cada caso antes de cerrar la nómina. De ese modo, afirmó que el Ministerio participa activamente del proceso y asume su parte de responsabilidad.
El ministro insistió en que los reclamos de la oposición fueron respondidos uno por uno. Afirmó que, al revisar los siete casos señalados, existían explicaciones documentadas. Según indicó, el resto de los oficiales no presentaba observaciones relevantes en sus legajos.
Entre los ejemplos mencionados, Riera citó a los comisarios Juan Alejandrino Pereira y Antonia Zamphirópolos. Indicó que ninguno registra condenas judiciales ni sumarios concluidos. En el caso de Zamphirópolos, sostuvo que fue ella quien denunció el robo de armas y que luego se probó su inocencia.
Respecto a Pereira, explicó que la investigación determinó que varios agentes tenían acceso a su cuenta. Esa cuenta fue utilizada para levantar el “código rojo” vinculado a la esposa de Sebastián Marset. Según Riera, ese hecho permitió descartar una responsabilidad directa del comisario.
El ministro reconoció que búsquedas en internet asocian esos nombres a escándalos públicos. Sin embargo, afirmó que se trata de publicaciones periodísticas posteriores aclaradas. Añadió que esos antecedentes mediáticos no coincidieron con resoluciones judiciales adversas.
Riera también confirmó que el 35% de los comisarios postulantes no superó la prueba del polígrafo. Indicó que esa evaluación y el examen físico son los únicos requisitos descalificatorios. En cambio, aclaró que la formación académica y el legajo no excluyen automáticamente.
Finalmente, el ministro defendió el uso del polígrafo en los ascensos. Afirmó que la herramienta permite reducir riesgos en la conducción policial. Sostuvo que la Comandancia elige su equipo y asume la responsabilidad por las designaciones aprobadas.
Fuente: ABC Color
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