En un hecho que ha conmocionado a la opinión pública de Colombia y que capta la atención regional, el senador colombiano Miguel Uribe Turbay fue herido de gravedad durante un acto político en Bogotá. Un adolescente, que sería menor de edad, disparó varias veces por la espalda contra el dirigente del partido Centro Democrático, mientras se encontraba dirigiendo un mitin público en el barrio de Fontibón, próximo al Aeropuerto Internacional de El Dorado.
Uribe Turbay, conocido por su férrea crítica al gobierno de Gustavo Petro y por su cercanía con el expresidente Álvaro Uribe, recibió seis impactos de bala, uno de ellos en la cabeza. Fue trasladado de urgencia a la Fundación Santa Fe, donde fue sometido a una cirugía que logró estabilizarlo parcialmente. La situación de salud del senador sigue siendo crítica, según reportaron medios locales.
La esposa del senador, María Claudia Tarazona, pidió al pueblo colombiano que se mantenga en oración por la recuperación de su marido, mientras confirmaba que la intervención quirúrgica había concluido. El representante Christian Garcés, colega de Uribe en el Congreso, aseguró que la familia permanece a la espera de que la condición del senador mejore.
El autor material del ataque, identificado como menor de edad, también resultó herido y fue detenido por las autoridades. Según trascendió, vivía con su abuela y su madre falleció tiempo atrás, mientras que su padre se encuentra en el extranjero. Las autoridades colombianas ofrecieron una recompensa de 3.000 millones de pesos (alrededor de 639.000 euros) por cualquier información que permita esclarecer este grave atentado.
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El presidente Gustavo Petro manifestó que la investigación se enfocará en las posibles fallas en el esquema de seguridad del senador Uribe Turbay. Asimismo, se comprometió a esclarecer los hechos y a sancionar a los responsables intelectuales y materiales.
Miguel Uribe Turbay, de 39 años, es nieto del expresidente Julio César Turbay y cuenta con una destacada trayectoria política. Ocupa un lugar importante en la contienda electoral presidencial prevista para el próximo año en Colombia. Su familia y seguidores mantienen la esperanza de su recuperación, mientras la comunidad internacional condena este atentado y pide garantías para la estabilidad democrática en la región.
Fuente: El Mundo
