Pese a ser inventado hace 20 años como potenciador de la concentración de los niños autistas, los fidget spinner son el juguete del momento. Volvieron a ver la luz en los Estados Unidos, pero su expansión ya ha llegado a América de Sur y ahora, las autoridades advierten de los peligros que traen ocultos.
El problema recrudece ya que la mayoría de estos juguetes llegan a los comercios producto del contrabando y la falsificación; hechos con impresoras 3D o en fábricas que inyectan plásticos y rulemanes sin pasar los controles apropiados. Esto pone en riesgo la salud de los niños.
En la siguiente página le contamos sobre su primera víctima.