Gloria Acosta, dueña del caballo, manifestó que, desde hace 15 años, Tacuary formaba parte del programa de equinoterapia que se desarrolla en RC4.
El equino realizaba trabajos de terapia con unos 300 niños y jóvenes con discapacidad.
Acosta, expresó su dolor por lo acontecido y sostuvo que no existen justificativos para tal hecho.
Los autores del suceso son, posiblemente, jóvenes adictos, que viven en las cercanías.
«Tacuary era un caballo emblemático, le formó a muchos oficiales y suboficiales de caballería, la tarea más noble que hacía era ayudar a los niños y jóvenes que están acá en el centro terapéutico de equinoterapia en el RC4», sostuvo llena de congoja.
Así también pidió para que se investigue el hecho y remarcó que es necesaria la aplicación de la ley del maltrato animal.
Más detalles abajo.
La ley
La Ley 5892, de la protección de los animales domésticos, silvestres y exóticos en cautividad.
El artículo 26 de la norma indica que toda persona está obligada a respetar y abstenerse de causar daño o lesión a cualquier animal. Igualmente, debe denunciar ante la autoridad de aplicación todo acto de crueldad cometido por terceros del que tenga conocimiento.
Gloria Acosta pidió que se cumpla la Ley del Maltrato Animal, luego de que en el Refugio RC4 hayan matado a Tacuary, el caballo que servía para realizar equinoterapia a 300 niños de tres fundaciones. “No voy a descansar hasta encontrarle al responsable”, expresó con dolor. #650AM pic.twitter.com/hwa1SwY0vN
— Radio Uno 650 AM (@UNO650AM) February 18, 2019