Pruebas de conocimiento y destreza caracterizan esta nueva edición de competencia culinaria, en la que los miembros del jurado no dejan pasar ni el más mínimo error.
La primera prueba fue de conocimiento, donde los participantes debían reconocer a qué ave corresponde cada huevo (8 aves diferentes), en el menor tiempo posible. En este desafío destacaron Julián y Waldy, quienes subieron directamente al balcón.
Además, los ganadores pudieron elegir a un compañero más para subir con ellos. Julián optó por Regina, y Waldi; por Negro, su hermano.
En la siguiente prueba, los que no subieron, debieron elaborar una entrada y un plato de fondo de comida vegana, estilo de cocina que rechaza por completo el uso de cualquier producto proveniente de los animales.
Tras el desafío, Juan Ángel, Rodrigo y Carolina lograron muy buenos platos y subieron directamente al balcón. Luego de la deliberación también aseguraron su lugar Osvaldo, Leticia y Lizzi.
El desafío final, es decir de eliminación, fue trabajar con dos elementos muy básicos de la cocina: lomo y papas, con la dificultad de transformar lo básico en algo fantástico. El tiempo de elaboración fue de 60 minutos y tras la deliberación del jurado, Eduardo dejó la cocina.
