Las fuerzas de seguridad paraguayas asestaron un golpe significativo al narcotráfico transfronterizo con la captura de David Silva Ferreti, un importante operador logístico del Primer Comando da Capital (PCC). El ciudadano brasileño fue detenido este martes durante un operativo coordinado por la Dirección de Inteligencia y la Dirección de Operaciones Urbanas de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad). Lo más llamativo del caso es que el narcotraficante residía en una lujosa mansión ubicada en pleno centro de Pedro Juan Caballero, a escasos cinco minutos de la jefatura policial del departamento de Amambay, en un claro desafío a las autoridades locales.
La detención se produjo en una residencia de alto valor situada en la esquina de las calles 15 de agosto y República de Cuba, donde Silva Ferreti se había establecido bajo una identidad falsa. Según las informaciones proporcionadas por los investigadores, el narcotraficante utilizaba documentación fraudulenta a nombre de Diego Da Silva Antonio, identidad con la que habría logrado evadir a las autoridades durante aproximadamente tres años. Durante este tiempo, no solo se mantuvo prófugo, sino que continuó coordinando activamente operaciones de tráfico de drogas hacia Brasil, específicamente envíos de cocaína por vía aérea desde territorio paraguayo hacia el estado de São Paulo.
Detienen en Pedro Juan Caballero a presunto narco brasileño
El detenido fue identificado como David Silva Farretti. El hombre aparentemente utilizaba documento de identidad falso, según datos de los intervinientes.
Su detención se dio tras un allanamiento en una vivienda… pic.twitter.com/JxNKqAvCTQ
— Radio Ñandutí (@nanduti) April 16, 2025
El fiscal Celso Morales, quien encabezó el procedimiento, confirmó que durante el allanamiento se incautaron diversos elementos de interés investigativo, incluyendo un importante arsenal. Entre los objetos decomisados figuran una pistola Lock calibre 9mm, un fusil tipo carabina Colt M4 con sus respectivas municiones, una camioneta Toyota Fortuner, un automóvil Chevrolet Onix, además de joyas, teléfonos celulares y una suma no especificada de dinero en efectivo. Este material evidencia el nivel de vida lujoso que mantenía el sospechoso, así como su capacidad operativa en la zona fronteriza.
La captura de Silva Ferreti está vinculada a investigaciones previas realizadas por la Policía Federal brasileña en el marco de la operación ‘Flying Low’ (Volando Bajo). Esta operación había resultado en la incautación de 500 kilogramos de cocaína en la localidad de Presidente Prudente, Brasil. Tras este decomiso, el ahora detenido cruzó la frontera hacia Paraguay para evadir la justicia de su país. Sin embargo, informes de inteligencia binacional confirmaron que desde su refugio en Pedro Juan Caballero, continuaba dirigiendo el flujo de estupefacientes hacia territorio brasileño, específicamente a zonas controladas por el PCC.
Saltos de Guairá: Capturan a líder del PCC buscado en Brasil
Medios de comunicación brasileños han detallado que Silva Ferreti desempeñaba un papel crucial en la logística del transporte aéreo de cocaína. Su función principal consistía en coordinar los envíos desde suelo paraguayo, utilizando rutas que atravesaban el estado de Mato Grosso del Sur hasta llegar a São Paulo, epicentro operativo del PCC. Esta organización criminal, considerada la más poderosa de Brasil, ha extendido significativamente sus operaciones en Paraguay durante la última década, controlando gran parte del tráfico transfronterizo de estupefacientes.
La presencia de narcotraficantes brasileños de alto perfil en territorio paraguayo se ha convertido en un patrón recurrente, especialmente en las zonas fronterizas. Hace menos de un mes, la Senad logró la captura de otro importante miembro del PCC en Saltos del Guairá, también en la frontera con Brasil. Se trata de Marcelo Rogerio Gnoato, alias ‘Alemao’, considerado un operador de alto rango dentro de la organización criminal y conocido por el apelativo de ‘matapolicías’. Al igual que Silva Ferreti, Gnoato había encontrado refugio en Paraguay durante varios años, utilizando el territorio nacional como base de operaciones para dirigir actividades criminales transnacionales.
Unite a nuestro canal de WhatsApp
El PCC representa actualmente la fuerza criminal más influyente en la región. Fundada en las cárceles de São Paulo en 1993, esta organización ha expandido sus operaciones a nivel global, estableciendo presencia en 24 países y contando con más de 40.000 miembros activos. Su influencia abarca los cinco continentes a través del tráfico internacional de drogas y la gestión de diversas operaciones ilícitas a gran escala. La expansión hacia Paraguay se intensificó tras el asesinato del entonces llamado ‘Rey de la Frontera’, Jorge Rafaat, en una operación que según estimaciones de la Senad, requirió una inversión de aproximadamente un millón de dólares en armamento, logística y sicarios profesionales.
La captura de Silva Ferreti representa un nuevo capítulo en la compleja dinámica criminal fronteriza, donde las organizaciones brasileñas han establecido una notable presencia en territorio paraguayo. Actualmente, el PCC mantiene una tregua con su antiguo rival, el Comando Vermelho, situación que ha facilitado su consolidación en zonas estratégicas de Paraguay. Investigaciones periodísticas publicadas por medios como O Globo han documentado cómo la ejecución de Rafaat en 2016 alteró significativamente el equilibrio de poder en la frontera, permitiendo que el PCC expandiera su control sobre las rutas de tráfico de cocaína y marihuana entre ambos países, aprovechando la porosidad fronteriza y los desafíos que enfrentan las autoridades para ejercer un control efectivo en estas regiones.
Fuente: La Política Online