El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció un importante cambio en su equipo de seguridad nacional. Este jueves confirmó la designación de Mike Waltz como embajador ante las Naciones Unidas, desplazándolo de su actual función como asesor de Seguridad Nacional. La decisión representa el primer gran movimiento de personal desde la asunción presidencial en enero.
Waltz, quien había experimentado una pérdida significativa de influencia en el ala oeste de la Casa Blanca, enfrentaba un panorama incierto desde principios de semana. Su salida se precipitó luego de un incidente relacionado con la divulgación involuntaria de información sensible. Trump, siguiendo su política de cambios estratégicos, comunicó personalmente a Waltz la decisión de trasladarlo al cargo diplomático en la mañana de este jueves.
Marco Rubio asume funciones clave en el Gobierno
Simultáneamente, Donald Trump anunció que Marco Rubio, actual secretario de Estado, asumirá de manera interina el rol de asesor de Seguridad Nacional, manteniendo su puesto diplomático principal. Esta decisión remite a antecedentes históricos, como el caso de Henry Kissinger bajo la presidencia de Richard Nixon, quien desempeñó ambas funciones simultáneamente.
La portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce, manifestó plena confianza en la capacidad de Rubio para gestionar ambas responsabilidades. Destacó su cercanía con el presidente y su experiencia en liderar equipos, señalando que la estructura gubernamental permite distribuir tareas entre colaboradores clave.
Reorganización de los asesores de seguridad
La salida de Waltz también podría implicar cambios adicionales dentro del Consejo de Seguridad Nacional. De acuerdo a fuentes oficiales, asesores como Alex Wong, adjunto en el área de seguridad, también podrían abandonar sus cargos próximamente, aunque no se especificaron fechas. Esta reestructuración forma parte de los ajustes que la administración busca implementar para consolidar su equipo de cara a los próximos desafíos internacionales.
La gestión de Rubio como asesor de seguridad nacional interino plantea interrogantes sobre la futura dirección de la política exterior estadounidense, en un contexto de creciente tensión global y redefinición de prioridades estratégicas.
Antecedentes recientes de Marco Rubio en el Gobierno
No es la primera ocasión en que Rubio asume nuevas responsabilidades en momentos críticos de la administración Trump. En febrero pasado, fue designado como administrador interino de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), una entidad sujeta a recortes presupuestarios dentro de los planes de austeridad gubernamental.
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Asimismo, Trump también le asignó en ese entonces la conducción interina de la Oficina Nacional de Archivos, en reemplazo de Colleen Shogan. Estos antecedentes refuerzan la confianza depositada en Rubio para liderar proyectos sensibles y de alta relevancia dentro de la administración.
Perspectivas para el nuevo embajador y el asesor interino
La designación de Waltz como embajador ante las Naciones Unidas permitirá reforzar la representación de Estados Unidos en un foro multilateral crítico, donde se discuten asuntos de seguridad, derechos humanos y cooperación internacional. Su experiencia previa en temas militares y de seguridad podría ser un activo importante para el rol.
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Por su parte, Marco Rubio, al asumir de manera interina la asesoría en seguridad nacional, deberá equilibrar las exigencias de dos funciones de alta complejidad. Su desempeño en este doble rol será observado de cerca tanto por el entorno político interno como por aliados y adversarios en el plano internacional.
Fuente: CNN