La Fiscalía y la policía allanaron una propiedad en Minga Guazú, Alto Paraná, que se sospecha era utilizada como fachada para la captación de mujeres destinadas a la explotación sexual en Francia. El procedimiento se realizó en el marco de una investigación por trata internacional de personas, iniciada a partir de informaciones que alertaban sobre el traslado de mujeres desde el interior del país y de Central hasta Europa.
La vivienda, que estaba deshabitada al momento del operativo, habría servido como lugar de paso para las víctimas mientras se gestionaban los trámites migratorios. Según los datos obtenidos por los investigadores, las mujeres eran captadas con promesas laborales y luego trasladadas para su explotación.
La fiscala Vivian Coronel, a cargo del caso, explicó que se logró identificar a una mujer de 25 años que sería la responsable o encargada de la quinta. Durante el allanamiento se incautaron teléfonos celulares que podrían contener información clave sobre la red criminal, incluyendo tarifas de los servicios que presuntamente eran ofertados en Francia.
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Coronel destacó que la mujer tenía en su poder un aplicativo en el que se manejaban los precios por hora en euros y otras monedas, lo que refuerza la hipótesis de que las víctimas eran enviadas a París y otras ciudades europeas para trabajos de explotación sexual.
Una red que apenas comienza a ser investigada
La investigación, según la fiscala, apenas inicia y podría develar una red de trata más amplia de lo que se presume en este momento. Comparó la investigación con una caja de pandora, ya que los primeros indicios muestran una estructura que podría tener ramificaciones tanto en Paraguay como en el extranjero.
Coronel recalcó que los delitos investigados incluyen rufianería y trata internacional de personas, con fines de explotación sexual infantil y de mujeres adultas.
Fuente: Última Hora
