Desde la medianoche del sábado, vastas zonas de los distritos de Altos, Nueva Colombia y San Bernardino permanecen sin energía eléctrica, afectando a miles de habitantes en el departamento de Cordillera. La falta de respuestas por parte de la Administración Nacional de Electricidad (ANDE) ha generado una ola de indignación entre los afectados, quienes amanecieron este domingo aún a oscuras, sin información oficial ni presencia de cuadrillas técnicas en sus barrios.
El corte de luz afecta de manera generalizada a hogares, comercios, emprendimientos turísticos y personas con necesidades especiales que dependen de aparatos eléctricos para vivir. Lo más alarmante, según denuncian los usuarios, es la completa ausencia de comunicación por parte de la ANDE: no hay comunicados oficiales, no se responden las llamadas telefónicas, y ni siquiera se puede registrar el reclamo a través de la aplicación móvil debido a la saturación del sistema.
Ramona González, pobladora de Nueva Colombia, expresó su frustración tras más de ocho horas sin suministro eléctrico. La afectada relató que perdieron alimentos, no pueden trabajar, y nadie les proporciona información sobre la situación. González añadió que esta situación se repite cada vez con más frecuencia, evidenciando un patrón de fallas recurrentes en el sistema de distribución eléctrica de la zona.
La situación genera mayor molestia porque hace apenas tres meses, la ANDE inauguró con gran propaganda la Subestación de Valenzuela, una obra anunciada como clave para mejorar la distribución eléctrica en la zona de Cordillera. Sin embargo, los constantes cortes como el de esta madrugada demuestran que la infraestructura no está dando los resultados prometidos, y que la millonaria inversión parece no haber resuelto los problemas de fondo del sistema.
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En San Bernardino, uno de los principales polos turísticos del país, la falta de energía representa un golpe económico directo para hoteles, restaurantes y alojamientos que dependen del suministro constante de electricidad. Un comerciante de la zona denunció pérdidas por la falta de refrigeración y expresó que la nueva subestación no cumplió con las promesas de un servicio más estable. En las zonas rurales de Altos y Nueva Colombia, la situación también golpea con fuerza a productores que utilizan sistemas de riego o refrigeración para conservar sus productos.
Fabricio Ortega, poblador de San Bernardino, cuestionó el aumento progresivo de las tarifas eléctricas sin una mejora correspondiente en la calidad del servicio. El ciudadano señaló que no hay excusas climáticas, no hay tormentas, no hay caída de postes, por lo que exige saber qué está fallando en el sistema. Ante la reiteración de cortes y la falta de planificación, la ciudadanía exige explicaciones concretas, soluciones urgentes y una auditoría transparente sobre la eficacia de las obras recientemente inauguradas por la empresa estatal.
Fuente: ABC Color
