Una fuerte explosión se registró el sábado por la tarde en una pollería de Fernando de la Mora, zona Sur. El estallido, provocado por una garrafa de gas, dejó destruido el local y ocasionó graves lesiones a su propietario, Robert Cabrera, de 56 años.
El siniestro ocurrió alrededor de las 17:30 en la pollería Mary, ubicada en la intersección de las calles 11 de Setiembre y Primero de Mayo. Testigos señalaron que la detonación fue tan intensa que el techo del establecimiento se desplomó y varias paredes quedaron comprometidas.
El estallido generó un incendio que rápidamente consumió gran parte de la estructura. Bomberos voluntarios acudieron al lugar y trabajaron durante varios minutos para controlar las llamas y evitar que se propagaran a viviendas vecinas.
Explosión de garrafa destruyó pollería en Fernando de la Mora
El propietario del local, Robert Cabrera de 56 años, sufrió lesiones y quemaduras.
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En el momento de la explosión, la esposa y los hijos de Cabrera no se encontraban en el interior, ya que habían salido rumbo a su casa. La ausencia de otras personas dentro del local evitó que el siniestro tuviera un saldo aún más trágico.
Robert Cabrera sufrió quemaduras en aproximadamente el 70% de su cuerpo. Fue trasladado al Centro Nacional de Quemaduras y Cirugías Reconstructivas (Cenquer), donde permanece en la unidad de terapia intensiva, intubado y con asistencia de fármacos de alta complejidad para estabilizar su estado.
De acuerdo con informes médicos, las lesiones no solo comprometieron la piel, sino también órganos vitales como los pulmones y el corazón. En las próximas horas se prevé su ingreso a quirófano para realizar procedimientos de limpieza y control de daños.
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Un hermano de la víctima explicó que al momento de la llegada de los bomberos, Cabrera aún se encontraba consciente y fue trasladado de inmediato. Reconoció que, aunque la pérdida material es grande, lo positivo es que no hubo más víctimas en el lugar.
Las autoridades investigan las causas exactas que originaron la fuga y posterior explosión de la garrafa. Este hecho vuelve a poner en debate la seguridad en el manejo de cilindros de gas en locales gastronómicos y la necesidad de reforzar controles preventivos para evitar tragedias similares.
Fuente: ABC / ÚH







