Un dron ruso impactó una guardería en la ciudad de Járkov en pleno horario escolar, dejando una víctima fatal y siete heridos. El ataque ocurrió luego de una ofensiva masiva con drones y misiles que alcanzó diez regiones del país. Según el presidente Volodimir Zelenski, todos los niños fueron evacuados a refugios, aunque muchos sufren síntomas de estrés agudo.
El ataque se produjo apenas días después de la cancelación de una esperada cumbre entre Vladimir Putin y Donald Trump, prevista en Budapest. La reunión, que buscaba destrabar un eventual acuerdo de paz, fue suspendida por decisión de Trump, quien afirmó no querer “perder el tiempo”. Desde Moscú, el Kremlin sostuvo que el encuentro “requiere una preparación cuidadosa”.
Unite a nuestro canal de Whatsapp
Durante la noche, más de 400 drones y 28 misiles fueron lanzados contra distintas ciudades ucranianas. En la región de Kiev, una madre y sus dos hijas, de 6 meses y 12 años, murieron cuando su casa fue alcanzada. Al menos 25 personas resultaron heridas en la capital, de acuerdo con las autoridades locales.
Zelenski renovó su llamado a Estados Unidos, la Unión Europea y el G7 para aumentar la presión sobre Rusia. “La única forma de obligar al Kremlin a negociar es con sanciones más duras y armamento de largo alcance”, señaló el mandatario ucraniano en un mensaje oficial. La guerra, que ya supera los tres años, continúa sin avances significativos en el frente.
ATENCIÓN. Putin ataca con drones un jardín infantil en Ucrania, @petrogustavo guarda silencio pic.twitter.com/mbtMj11aVb
— By Viral 24 (@ByViral24) October 22, 2025
Por su parte, el Ejército ucraniano confirmó haber atacado una planta química en Bryansk, dentro del territorio ruso, utilizando misiles Storm Shadow de fabricación británica. Moscú reconoció el ataque, pero sin mencionar daños en la instalación militar.
Mientras tanto, Zelenski inició una gira diplomática por Noruega y Suecia para fortalecer alianzas y buscar más apoyo militar. En Bruselas y Londres se prevén reuniones clave para definir nuevas sanciones económicas contra Rusia y coordinar envíos de armas.
Los ataques rusos, que también afectaron infraestructura energética, provocaron apagones generalizados y temor entre los ciudadanos. “Fue muy aterrador para los niños, nunca pensé que esto podría suceder en nuestro vecindario”, relató una vecina de Kiev tras escuchar las explosiones. La población intenta recuperarse de una noche que dejó claro que la guerra, lejos de cesar, sigue expandiéndose.
Fuente: Clarín







