Los nómadas digitales están transformando el panorama económico paraguayo con un impacto estimado de 63 millones de dólares anuales, según revela el análisis de Ricardo Peña para Infonegocios. Estos profesionales remotos, equipados con laptops y dispositivos tecnológicos, representan una nueva fuente de ingresos que fluye directamente hacia la economía local sin requerir inversión estatal significativa ni infraestructura adicional compleja.
El fenómeno cobra dimensión en espacios de coliving de Asunción, donde convergen bolivianos especialistas en bienes raíces, desarrolladores españoles de software, italianos y argentinos que planifican sus próximos destinos. Esta comunidad internacional convive en departamentos independientes con áreas comunes como piletas y parrillas, creando un ecosistema social dinámico que replica modelos exitosos de ciudades como Berlín o Miami.
La elección de Paraguay como destino responde a una ecuación económica favorable para estos profesionales. El costo de vida local permite que ingresos en dólares o euros generen un poder adquisitivo superior al de ciudades como Nueva York, Madrid o Buenos Aires. La infraestructura digital ha mejorado significativamente, ofreciendo conexiones estables para videollamadas y transferencias de datos pesados, elementos esenciales para el trabajo remoto profesional.
PARAGUAY| Paraguay se perfila como la joya escondida para bitcoiners y nómadas digitales. Según el bitcoiner checo Jan Kotas, el país cuenta con un buen sistema fiscal territorial porque los ingresos que se generan fuera de su territorio no pagan impuestos.
— Isabel Ortiz (@imisabeloficial) August 13, 2025
La seguridad relativa de Asunción comparada con otros destinos regionales constituye otro factor determinante en la decisión de establecerse temporalmente en el país. El ambiente social local se adapta progresivamente a las necesidades de esta comunidad, con cafeterías, bares y espacios de coworking que ajustan sus servicios a horarios y demandas específicas de trabajadores remotos internacionales.
Los beneficios fiscales representan la ventaja competitiva más significativa del Paraguay en este mercado. El principio de territorialidad aplicado por la legislación local exime del pago de impuesto a la renta generada en el exterior, permitiendo que los nómadas digitales mantengan prácticamente intactos sus ingresos. Esta política contrasta favorablemente con regímenes fiscales de España o Argentina, que aplican impuestos progresivos elevados a residentes.
El impacto en el mercado inmobiliario se concentra en segmentos premium de alquiler temporario. Los nómadas demandan departamentos amoblados, modernos y bien ubicados, con amenities que faciliten el trabajo diurno y la socialización nocturna. Esta demanda se focaliza en barrios caminables donde servicios esenciales, espacios de coworking y opciones gastronómicas están disponibles a corta distancia, generando oportunidades para desarrolladores inmobiliarios especializados.
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El gasto promedio de un nómada digital oscila entre 1.500 y 2.000 dólares mensuales, incluyendo alojamiento, gastronomía, transporte, entretenimiento y servicios profesionales. Con una proyección conservadora de 3.000 nómadas digitales simultáneos en el país, el ingreso anual estimado alcanza los 63 millones de dólares. Esta cifra representa dinero fresco que ingresa sin pasar por licitaciones públicas, endeudamiento estatal o programas subsidiados.
El efecto multiplicador se extiende hacia sectores de servicios que generan empleo indirecto para trabajadores locales. Mozos, conductores, instructores deportivos, guías turísticos y diseñadores colaboradores se benefician de la demanda adicional generada por esta comunidad internacional. Ricardo Peña destaca que estos profesionales remotos frecuentemente actúan como precursores de inversiones empresariales más significativas, atrayendo startups y capital que buscan aprovechar las mismas ventajas competitivas que motivaron su llegada inicial al mercado paraguayo.
Fuente: Infonegocios
